Viajes
La ultima excentricidad del magnate Bruce Makowsky

La mansión más cara jamás vendida en EE.UU

Las mansiones, esos inmensos edificios que todo ser viviente le gustaría poseer. Unos lugares en los que se respira lujo y comodidad y a los que normalmente les acompaña un precio desorbitado. Pues bien, en Estados Unidos se han superado todos los récords en cuanto a ventas se refiere. Decimos esto porque ha salido al mercado una espectacular mansión de Bel Air (Los Ángeles) por nada menos que 234,5 millones de euros.

Una casa de locos

Sabíamos que en el exclusivo barrio de Bel Air existían los lujos, pero nunca nos hubiéramos imaginado que las ventas llegaran a estos niveles. Repetimos la cifra, 234,5 millones de euros es lo que tendrás que pagar para adquirir esta impresionante mansión. Un edificio catalogado como la residencia más cara que se ha puesto a la venta en Estados Unidos.

La mansión cuanta con una sala de cine para 40 personas

Eso sí, esta propiedad incluye todos los lujos. Hablamos de 12 habitaciones, tres cocinas, bolera propia, sala de cine, helicóptero privado e incluso una colección de vehículos de lujo valorada en unos 28 millones de euros. Sin olvidarnos de la típica sala de ocio americana en la que se incluyen numerosos futbolines, billares y máquinas de chucherías para los más pequeños. Un lugar en el que no tendrás que esperar para hacer tus necesidades, ya que cuenta con nada menos que 21 cuartos de baño perfectamente repartidos por toda la casa.

La calidad tiene un precio

«Esta casa huele a calidad». Esas son las palabras de Bruce Makowsky, creador de esta cuna de lujos y excentricidades. Un poderoso magnate que ha conseguido poner a la venta esta inmensa parcela de 11.500 metros cuadrados para la que necesitó más de 300 personas trabajando durante cuatro años. Una construcción que realizó a título propio, argumentando que «si construyes lo mejor, siempre habrá un comprador interesado».

Exteriores de la mansión

Cabe destacar que en el precio de la propia vivienda se incluye el salario de siete empleados durante una etapa de dos años. Parece ser que a esta residencia no le falta ningún detalle, bueno sí, un millonario que que tenga el suficiente dinero para pagar este tipo de lujos y darle una alegría al bueno de Makowsky.