La joya oculta de Castilla-La Mancha: el rincón escondido para un fin de semana romántico

• Gemma Meca
• Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.
• • 08/01/2025 16:15
  • Actualizado: 08/01/2025 16:15

Este rincón escondido de Castilla-La Mancha es una joya oculta perfecta para un fin de semana romántico. Si estás haciendo planes para este 2025, no lo dudes, ha llegado el momento de empezar a pensar en todo lo que tenemos por delante y en lo que nos está esperando. De la mano de algunos elementos que quizás hasta ahora no hubiéramos tenido en cuenta. Es el momento de prepararnos para lo que está por llegar, de la mano de una serie de elementos que quizás debemos tener en cuenta.

A la hora de escaparnos en pareja, hay un denominador común, tranquilidad y placer, son las palabras que llevamos escritas a fuego. Vamos a pasarlo bien, desconectar de la familia, el trabajo y las obligaciones, para centrarnos, única y exclusivamente, en dar y recibir amor en un marco que nos invite a ello. Un lugar en el que podremos redescubrir una serie de elementos que serán los que marcarán la diferencia y que pueden acabar siendo los que mejor se adapten a nuestras necesidades. Si estás pensando en sorprender a tu pareja de cara a una fiesta de San Valentín que está cerca, no lo dudes, ha llegado el momento de pensar en este pueblo.

El rincón escondido para un fin de semana romántico

El romanticismo es uno de los motivos de fuerza mayor que nos lleva a tomar decisiones y hacer planes que quizás hasta ahora no hubiéramos tenido en cuenta. Toca ver qué es lo que nos está esperando en unos días en los que el amor será el gran protagonista. En este caso, debemos estar preparados para un giro radical.

Sin esperarlo estamos a las puertas de una nueva festividad que llegará en febrero, el plan perfecto para poder descubrir un lugar especial de nuestro país. Tenemos la suerte de vivir en un lugar en el que vamos a ver un cambio importante, quizás sin esperarlo. Un país cargado de pueblos especiales que nos acogerán en unas vacaciones que debemos empezar a ver llegar.

Antes que nada, debes definir la escapada. Para un plan romántico, nada mejor que encontrar un punto en el que perderse para descubrir en primera persona qué nos está esperando en unos días en los que la tranquilidad y el amor harán acto de presencia. Te descubrimos una joya oculta de Castilla-La Mancha que se convertirá en tu mejor plan.

Esta es la joya oculta de Castilla-La Mancha

Castilla-La Mancha es una comunidad autónoma, cerca de la capital y de casi todo. Vivimos en un país en el que moverse por España puede llegar a ser especialmente sencillo. Con el depósito lleno y ganas de pasarlo muy bien, te proponemos un buen plan romántico que seguro que te apasionará en todos los sentidos.

La Solana es un lugar que hay que visitar para poder disfrutar de una zona que es realmente especial. Tal y como se nos presenta en la web de Turismo Castilla-La Mancha: «Entre llanuras se encuentra el pueblo de la Solana, perteneciente a la comarca de La Mancha, famoso por su azafrán, sus hoces y sus botas de vino. Llegamos hasta él pasando por Daimiel y Manzanares, en la N-430. Además de sus construcciones religiosas, de importancia, de las que daremos datos más adelante, el pueblo tiene uno de los conjuntos urbanos más importantes de la provincia. Vertebrado en torno a la Plaza Mayor el visitante debe distinguir dos zonas; el lado este donde está el Ayuntamiento cuenta con porches adintelados; y el oeste y norte también con porches en forma de arco de medio punto y sobre los que se levantan casas de dos plantas».

Siguiendo con la misma explicación: «Como hemos dicho, La Solana cuenta con varias iglesias que es recomendable visitar. La primera de ellas, en la misma Plaza es la de Santa Catalina, declarada B.I.C y llevada a cabo por el maestro Aliseda. Se empezó a levantar en 1420 y se terminó en 1433; pero su estado de ruina a finales del siglo XV obligó a reconstruirla. Este proyecto terminó en 1524. De todo el conjunto lo que sobresale a los ojos de cualquiera es su impresionante Torre, pese a que se ha derrumbado en varias ocasiones mantiene su majestuosidad y es famosa en toda la provincia. Del convento de los Trinitarios, en la calle del Convento, sólo queda la iglesia de San Juan Bautista, de estilo barroco con rasgos clasicistas fue reconstruida en 1970 y conserva un pasadizo elevado que cruza la calle Arco del Convento. Y para terminar con las iglesias visite también la de San Sebastián, Monumento Histórico Artístico desde 1982. Es singular su acceso a través de un pequeño patio y la cubierta mudéjar de su única nave, con incrustaciones de nácar y policromada. En su última restauración se han encontrado unos frescos en los que apenas se distinguen figuras, pero sí inscripciones góticas. En cuanto a su arquitectura civil, la Casa de Don Diego, declarada B.I.C, fue construida en el siglo XIX y como es habitual en este tipo de viviendas tiene dos plantas, puerta y balcón centrales y ventanas laterales con enrejado. Dentro un patio central columnado y suelo de canto o guijarro».