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Pueblos navideños

Huye de las grandes ciudades: uno de los mejores mercados navideños españoles está en esta mágica villa medieval

Varios mercados navideños de España son imperdibles por propuestas que combinan artesanía, actividades familiares y ambientaciones que buscan conservar un aire clásico sin depender de grandes montajes. Estos eventos suelen adoptar elementos propios de cada región, lo que dio lugar a que algunos pueblos rurales ganen un protagonismo antes inimaginable.

A veces, quienes quieren vivir a tope el espíritu navideño, huyen de la gran ciudad para buscar calles empedradas, monumentos medievales y plazas tradicionales que tiñan de Navidad con luces y decoraciones. Y claro, esta atmósfera festiva no estaría completa sin los mercados navideños, por lo que estamos por develar cuál es uno de los mejores para visitar este fin año.

¿Cuál es uno de los mejores mercados navideños de España?

Entre los mercados navideños más destacados de España, el radicado en Santillana del Mar, un modesto pueblo de Cantabria, ocupa una posición singular. Su casco histórico (conservado como conjunto patrimonial) se convierte cada diciembre en escenario de un evento que ha ido ampliando su oferta y su presencia pública.

La cita de este 2025 mantiene la estructura habitual: dos jornadas en el Parque de la Robleda, entre el 13 y 14 de diciembre, con horario continuado de 12:00 a 21:00.

El espacio reúne puestos artesanales, decoración estacional, productos gastronómicos locales y un ambiente que se despliega entre construcciones de piedra datadas entre los siglos XIV y XVIII. La apuesta por productores de la zona es uno de los rasgos principales.

En los mostradores se encuentran quesadas, sobaos y orujo, junto con cerámica y textiles hechos por talleres familiares que mantienen técnicas transmitidas durante generaciones.

Algunos puntos destacados del mercado y alrededores son los siguientes:

El emplazamiento refuerza la estética del conjunto. Las luces, distribuidas por todo el centro urbano, funcionan como un telón continuo que acompaña el recorrido desde la Plaza Mayor hasta la Colegiata.

Así se transforma el pueblo de Santillana del Mar para Navidad

En este pueblo medieval, la iluminación de finales de noviembre marca el inicio de la programación. Las calles principales y las fachadas de piedra refuerzan una ambientación que se integra con la arquitectura del municipio. La disposición de los puestos del mercado aprovecha la morfología del casco histórico, lo que facilita un tránsito uniforme entre plazas y calles.

El Parque de Revolgo adquiere un papel relevante: allí se instala un poblado temático con lago, nieve artificial, renos y osos decorativos. Este espacio, concebido como un enclave independiente dentro del municipio, incorpora además una zona para recibir a los Reyes Magos, con un buzón para correspondencia infantil y elementos escenográficos de gran tamaño.

La presencia de estos recursos visuales no desplaza la identidad del lugar, que conserva un tono sobrio asociado a la piedra de sus edificios. A ello se suma la programación de actividades culturales y la proximidad de la Colegiata de Santa Juliana, cuya iluminación nocturna se incluye dentro del recorrido.

Un referente entre los mercados navideños de España por su programación

El mercado se complementa con actividades que extienden la oferta más allá de la compra de productos locales. Uno de los elementos que más interés despierta es el videomapping proyectado sobre varias fachadas históricas de la Plaza Mayor.

Con 45 pases programados y una temática vinculada a Altamira, la propuesta combina luz y música sin alterar la estructura de los edificios. El efecto final destaca por su integración con los muros y por el uso de motivos inspirados en los orígenes culturales de la zona.

En años anteriores, el mercado y su entorno también han contado con:

El conjunto crea una sucesión de espacios diferenciados que amplían el recorrido más allá del mercado central y que han permitido que Santillana del Mar mantenga un creciente flujo de visitantes.

Cómo visitar Santillana del Mar y qué más hay para apreciar en este pueblo medieval

Para llegar a Santillana del Mar, lo más común es ir en coche (Autovía A-67 desde Santander) o en autobús (desde Santander, línea La Cantábrica), ya que es accesible desde la capital cántabra, a solo unos 30-40 minutos en coche o bus.

Otra opción es el tren (FEVE) hasta la estación de Puente San Miguel y luego un taxi o caminata, aunque el coche permite explorar más fácilmente la zona y las cercanas Cuevas de Altamira.

Para concluir, no hay que olvidarse que el atractivo del mercado se vincula a un patrimonio arquitectónico consolidado.

Y es que Santillana del Mar, incorporada desde 2013 a la red Los pueblos más bonitos de España, reúne edificios como la Torre de Don Borja, el Palacio Barreda-Bracho, el Museo Regina Coeli o el Museo Jesús Otero, que aportan un contexto histórico que complementa la visita.