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Para qué sirve la vitamina A en nuestro organismo

En tu cocina no pueden faltar los alimentos ricos en vitamina A. Entre ellos se encuentran los productos lácteos, vegetales de hoja verde, espinacas o zanahorias. ¿Pero en realidad para qué sirve la vitamina A?

Resulta necesaria para la creación de los tejidos; la formación de dientes, huesos y piel; el crecimiento de células y el adecuado funcionamiento de las vías respiratorias. También se ocupa de conservar en un buen estado a la vista y la piel. Pero hay otros beneficios que pueden resultarte interesantes.

Propiedades de la Vitamina A

Mejora de la vista

La vitamina A tiene tanta importancia en la salud de los ojos que nos ayuda a diferenciar entre la luz y la oscuridad. Pero su propiedad va más allá de esto y consigue prevenir la degeneración macular y las cataratas.

Incrementar las defensas

Nuestras defensas se verán reforzadas con esta vitamina. Desempeñan un papel destacado para los glóbulos blancos que nos mantienen alejados de las infecciones y enfermedades. Además de reforzar el sistema inmunológico también hace lo propio con las zonas de entrada más susceptibles de sufrir infecciones.

Antioxidante

Ofrece una protección ante el daño que pueden ocasionar a las células los radicales libres. Será una manera de mantenernos alejados de patologías como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, el cáncer, et.

Reforzar dientes y huesos

Esta vitamina también realiza una labor importante en lo referente a la constitución y desarrollo de los tejidos. Conseguiremos de esta manera unos huesos y unos dientes más fuertes.

Belleza de la piel

Su poder antioxidante ayuda a evitar el envejecimiento prematuro. La vitamina A contribuye a mantener en todo momento la piel hidratada y se presenta como una solución adecuada ante el acné.

Alimentos ricos en vitamina A

Entre las fuentes naturales de Vitamina A principales se encuentran:

No te olvides que el déficit de vitamina A puede generar problemas en los huesos, debilitamiento en las defensas, problemas de piel o incluso ceguera.