En qué consiste el Sandbag sprint en crossfit

En los entrenamientos de crossfit las carreras cortas y explosivas suelen ser muy frecuentes. A ellas se le añaden una cierta dosis de dificultada con lastres u otros complementos. Entre estos ejercicios se encuentra el Sandbag Sprint. A continuación te damos más detalles para que sepas en qué consiste el Sandbag sprint en crossfit.

Básicamente, su nombre lo dice todo. Hay que correr a gran velocidad durante una distancia reducida cargando con un saco de arena. Este saco es uno de los elementos que más se emplea en esta disciplina. Hay que cogerlo del suelo y ponerlo sobre la espalda de manera horizontal, detrás de la cabeza y sujetado con las dos manos, o sobre uno de los hombros y agarrado con una mano, por lo general.

En el caso de colocarlo a un lado y apoyado sobre el hombro, hay que sujetarlo con la mano del mismo lado, mientras que si va detrás de la cabeza y en forma horizontal, se agarrará con las dos manos. El ejercicio consiste básicamente en desplazar este saco a gran velocidad de un extremo a otro del circuito, siguiendo las indicaciones que realicen los monitores.

En los centros deportivos en los que se practica crossfit existen sacos con diferentes pesos. Lo más habitual es que se emplee material a partir de los diez kilos, y a partir de ahí se pueda incrementar en función de las condiciones de cada uno. En cuanto a la distancia a recorrer, oscila entre los 20 y 50 metros en función del espacio disponible. Puede parecer sencillo, pero una carga importante sobre la espalda retrasará bastante la carrera y en los metros finales se notará el cansancio.

Músculos que más se implican en este movimiento

En este ejercicio se ejercita sobre todo la parte aeróbica, ya que se trata sobre todo de correr. Al llevar ese peso encima también se trabaja la potencia y la fuerza, por lo que se puede considerar un entrenamiento de lo más completo.

Los principales músculos que entran en escena y que se beneficiaran del sandbag sprint son los cuádriceps, gemelos, glúteos e isquiotibiales en la parte inferior del cuerpo, pero también hay que contar con los dorsales, hombros, lumbares y brazos, que se ocupan de soportar la carga y sujetarla, además del descenso del saco.

Lo más aconsejable es que las personas que comiencen con este ejercicio lo hagan aplicando pesos bastante bajos para ir aumentando de forma progresiva a medida que se van sumando sesiones de entrenamiento. Este tipo de ejercicio se emplea con bastante frecuencia como cierre de un circuito o sesión preparatoria, pero además de ser uno de los movimientos más empleados en crossfit también es muy común verlo en las competiciones de resistencia como la Spartan Race.

Sin lugar a dudas es una gran propuesta para aquellas personas que deseen ganar en explosividad y velocidad en distancias cortas. Por ejemplo, para futbolistas o tenistas. Al correr con este peso extra les costará realizar ciertas marcas, pero una vez que vuelvan a ejercitarse con él se notarán mucho más ligeros.