OkSalud

Cómo reducir los efectos del jet lag

Las personas que alguna vez han viajado miles de kilómetros en avión en apenas unas horas posiblemente habrán sido víctimas del jet lag, que también se le conoce como síndrome de los husos horarios o disritmia circadiana. El organismo tiende a resentirse por ello. Algunos especialistas lo llegan a considerar un trastorno del sueño. En este artículo te enseñamos cómo reducir los efectos del jet lag.

Te notas con mucho sueño, cansado y con incómodos dolores de cabeza. También se aprecian otras molestias como enfado, irritabilidad, apatía, depresión, diarreas, dolor de estómago, vómitos, dolor de piernas y deshidratación. Los motivos se encuentran en el desfase horario, ya que el reloj biológico no coincide con la hora local de ese sitio.

Por lo general, las mujeres suelen ser más propicias a experimentar el jet lag que los hombres. También lo acaban sufriendo más los mayores de 50 años.

Se puede evitar este problema con una serie de recomendaciones a modo de prevención. Entre otras cosas, se aconseja que una semana antes de realizar ese viaje a otro continente intentemos adaptarnos lo máximo posible. En el caso de que en tu destino tengas que adelantar la hora, lo mejor es que te acuestes y te despiertes algo más temprano.

También hay una serie de recomendaciones mientras viajamos en avión para reducir las consecuencias del jet lag. Procura adaptar tus horas de sueño al horario de destino, descansar durante el viaje, caminar algo por el avión para mantener una correcta circulación sanguínea, consumir mucha agua y evitar ciertos alimentos como la cafeína o el alcohol.

Una vez que el jet lag haga acto de presencia, lo único que nos queda es intentar reducir sus efectos.

Es necesario que adaptes tus horarios a los horarios locales, a los del lugar al que vayas a estar, sobre todo en lo que se refiere a horarios de descanso y de comida. Siempre que sea posible intenta disfrutar de los rayos del sol, ya que entre otras cosas te aportarán vitamina D, que son necesarios para que tu cuerpo se sienta mucho mejor.

Después de un vuelo muy largo, de varias horas en donde también haya cambios horarios, lo principal el primer día es tomarse las cosas con calma y relajarse. Posiblemente no te cueste tanto si regresas a casa después de una estancia fuera, pero si acabas de llegar a tu destino de vacaciones, las ganas exageradas de realizar excursiones y actividades pueden jugarte una mala pasada. Reserva las propuestas más exigentes para más adelante, cuando tu cuerpo se encuentre más descansado.

Realizar algo de deporte para estimar musculatura

Hacer ejercicio físico te permitirá incrementar la producción de endorfinas, lo que te permitirá sentirte mucho mejor. Además agradecerás también estirar los músculos después de un viaje muy largo en avión.

Para hidratar el organismo deberías tomar abundante cantidad de agua, y olvidarte por completo de las bebidas con cafeína o con alcohol. No te aportarán nada positivo, así que déjalas si eso para otro momento.