OkSalud

Programas de cribado y cáncer de colon: claves para su prevención

La detección temprana de este tipo de cáncer, gracias a programas de cribado poblacional, puede permitir su detección en un estadio muy temprano, e incluso evitar su aparición

El cáncer de colon es actualmente el único tumor que puede prevenirse. De hecho, aunque es el de mayor prevalencia en España y conlleva una gran mortalidad, se calcula que hasta un tercio de los casos son curables si se detectan a tiempo y se tratan adecuadamente.

Por ello, es de vital importancia concienciar a la población respecto a la prevención de esta enfermedad y, sobre todo, respecto a la importancia de obtener un diagnóstico temprano. Una detección a tiempo que puede llegar gracias a los programas de cribado poblacional que deberían realizarse a todas las personas, a partir de los 45-50 años (tradicionalmente, se consideraba la edad de inicio los 50 años, pero en EE.UU. se ha visto un aumento significativo de la incidencia de estos tumores entre los 45 y 50 años, de ahí las nuevas recomendaciones).

Un cáncer con alta incidencia

El cáncer de colon es una de las principales preocupaciones sanitarias en España. Su alta incidencia y mortalidad (es el segundo tipo de tumor más habitual entre hombres tras el de próstata, llegando a afectar a uno de cada 20; y también entre las mujeres después del de mama, detectándose en una de cada 30 antes de los 74 años) lo ha colocado como uno de los más letales en los últimos años.

Este tipo de cáncer se desarrolla a través de pólipos que van creciendo y degenerando a lo largo de los años, de forma que en un momento determinado se transforman en un tumor, o cáncer propiamente dicho. Desde el Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, el Dr. Francisco Javier Romero Vázquez, jefe del Servicio de Aparato Digestivo y Endoscopia, recuerda además que «la prevalencia de factores de riesgo como la dieta baja en fibra y alta en grasas, el sedentarismo, la obesidad, el tabaquismo y el consumo de alcohol, así como antecedentes familiares de cáncer colorrectal, contribuyen a la alta incidencia de esta enfermedad en España».

Los programas de cribado poblacional

Realizar pruebas preventivas de cáncer colorrectal, principalmente las de detección de sangre oculta en heces y colonoscopias, a partir de los 45-50 años, son primordiales para la detección precoz de este tipo de tumores y, por tanto, para reducir la mortalidad asociada.

«Teniendo en cuenta que el cáncer de colon es el único tumor que puede prevenirse, es fundamental evitar su aparición o, en el peor de los casos, detectarlo en un estadio muy inicial», incide el Dr. Romero Vázquez, recordando la importancia de realizar estas pruebas sistemáticas para poder identificar a aquellas personas asintomáticas con riesgo de desarrollar cáncer de colon ya que «son vitales para poder establecer así un tratamiento temprano y más eficaz».

Dos pruebas clave

Entre los métodos de cribado poblacional para el cáncer colorrectal, destacan dos pruebas: el test de sangre oculta en heces (TSOH) y la colonoscopia.

1. Test de sangre oculta en heces (TSOH)

Se trata de un método no invasivo que detecta la presencia de hemoglobina (sangre) en las heces. Sin embargo, puede llegar a resultar inespecífico dado que no siempre un resultado positivo indica la presencia de un pólipo con degeneración avanzada o un tumor. En estos casos, para descartarlo, se recurre normalmente a una colonoscopia, la otra prueba de cribado. Por el contrario, un resultado negativo no siempre descarta la existencia de un pólipo con degeneración avanzada o tumor, especialmente en el caso de lesiones planas.

2. Colonoscopia

La colonoscopia, por su parte, es la prueba más fiable. No sólo porque permite detectar la presencia de pólipos con un alto índice de degeneración o cáncer, sino porque además permite identificar lesiones precancerosas y resecarlas o extirparlas en el acto, impidiendo así que esos pólipos en un futuro puedan convertirse en un cáncer. Además, se trata de exploraciones que se realizan con sedación profunda, controlada por anestesista, lo que conlleva la realización de una prueba sin dolor ni malestar para el paciente.

¿Quién debe hacerse la prueba?

Desde Quirónsalud recomiendan realizar este cribado en personas entre 45-50 y 75 años asintomáticas. Por su parte, aquellos con antecedentes familiares de cáncer de colon, enfermedades inflamatorias intestinales o síndromes hereditarios, el especialista recuerda que se requiere «un inicio más temprano y una mayor frecuencia en las pruebas, por lo que quedan excluidos de estos programas de cribado poblacional».

Por último, el Dr. Romero Vázquez, recuerda la importancia de que estos programas sean accesibles, así como de seguir concienciando a la población sobre los mismos y sobre la necesidad de realizarse colonoscopias rutinarias para detectar la presencia de pólipos que en el futuro puedan convertirse en un tumor.