Flamenquines de pavo

Los flamenquines de pavo son una de esas recetas fáciles de preparar que quedan muy ricas y siempre apetecen. Una cena informal se puede convertir en algo fascinante y divertido gracias a este plato. Los flamenquines tienen como principal aliciente su rebozado y ese interior fundido de delicioso queso capaz de conseguir las mejores críticas culinarias. El pavo será la base de este plato, una carne blanca baja en grasas muy recomendable para consumir de forma frecuenta. Gracias a esta receta no habrá excusas que valgan, se puede preparar una cena que desaparece en un abrir y cerrar de ojos, con unos pocos ingredientes y muchas ganas de disfrutar. Toma nota de estos flamenquines de pavo, van a triunfar.

Ingredientes:

• 8 lonchas de pechuga de pavo
• 8 lonchas de queso
• 2 huevos
• Pan rallado
• Aceite de oliva

Cómo preparar flamenquines de pavo:

1. Estos flamenquines se preparan muy rápidamente, pueden ser una buena primera experiencia culinaria para los más pequeños de la casa. Las longas de pechuga de pavo las cortamos según el tamaño que querer hacer los flamenquines.
2. Si quieres hacer tipo tapas mejor que sean tiras pequeñas, se pueden comer de un solo bocado o mojar en una salsa de forma mucho más cómoda. Además, se preparan de forma mucho más rápida.
   
3. Repetimos la operación con el queso, lo cortaremos de la misma medida que el pavo, de esta manera podremos enrollarlos más fácilmente.
4. Ponemos una loncha de pavo y encima una loncha de queso, la enrollamos, repetimos la operación un par de veces más, hasta que tengamos un cilindro de un tamaño considerable. Como son lonchas finas, es mejor que quede un poco más consistente dándole mucho más sabor.
5. Preparamos el pan rallado y el huevo para freír estos flamenquines. En un plato ponemos el pan rallado, en el otro batimos los huevos hasta conseguir que estén en su punto.
   
6. Ponemos la sartén con abundante aceite de oliva. Cuando esté caliente vamos poniendo los flamenquines, primero los pasamos por el huevo y después por el pan rallado. Van directamente a la sartén de uno en uno, mejor no poner mucha cantidad porque el aceite pierde temperatura y eso puede significar que nos quede un rebozado mucho menos compacto.
7. A medida que estén listos los iremos retirando a medida que estén bien dorados, en unos 5 minutos estarán en su punto. Los ponemos sobre papel absorbente y dejamos que eliminen el aceite que les sobra. Servimos en caliente es cuando están mejor.