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Levántate OK | Que Ada Colau pueda ser ministra de Vivienda es una invitación a irse de España

En el programa de hoy Levántate OK, Javier Cárdenas advierte a sus oyentes: «Prepararos España entera -dice Javier Cárdenas- que Ada Colau puede ser ministra de Vivienda para todo el país, ya la sufrimos en Barcelona, ahora como llegue a ministra de España dan ganas de irse». «Cuando tú te crees que te has quitado de encima semejante muerto, aparece encima con un cargo de mayor responsabilidad, felicidades a los que han votado al PSOE y a sumar que dios os tenga en la gloria, felicidades», indica Cárdenas.

«Por cierto, habitualmente se dice que la gente vota al PSOE no es gente de dinero, que tenga empresas y tal, pero se ha demostrado que habitualmente quien más paga el pato con el PSOE, es la gente más vulnerable, la gente con menos dinero, la prueba está que en Barcelona la gente que peor lo ha pasado es la gente que menos dinero tenía. A ver si algún día se dan cuenta de lo que es votar al PSOE, que es votar miseria, a ver si algún día se dan cuenta. Pero lo de Ada Colau es ya palabras mayores, aumentó la delincuencia, la violencia, las violaciones en Barcelona, ciudad líder de Europa y de regalo eh, ministra, prepararos el resto de España porque aquí ya hemos hecho el calentamiento, tremendo. Este país es pandereta y se avecina tsunami, este país no puede funcionar con ministras como Ada Colau», resalta Cárdenas.

Durante su mandato en Barcelona, la suciedad es un problema añadido a la importante inseguridad que vive la ciudad. Los robos se suceden a diario y la delincuencia se ha instaurado en la urbe. «En barrios como El Raval no se atreve Amazon a repartir, no es aconsejable visitar esa zona», explica un ciudadano catalán en una conversación con OKDIARIO. A todo esto se unen unos servicios públicos tensionados debido a la masificación turística. Cada día llegan hasta Barcelona numerosos turistas que vienen a visitar la ciudad. La propia alcaldesa Ada Colau propuso limitar el número de cruceros para así contener el número de turistas, sin embargo, su idea fue tirada por tierra debido al importante impacto económico que tiene la llegada de estos turistas. «A mí los turistas no me molestan», asegura un barcelonés entrevistado por este periódico.