País Vasco
Elecciones en País Vasco

El PP se fija la meta de subir al menos un escaño en cada provincia vasca ante el «voto residual» de Vox

El partido de Javier De Andrés buscará pasar de los 6 diputados de ahora a 9 como mínimo y ser "decisivo"

Vox no inquieta aquí al PP, que no le ve más apoyo que el registrado en el pasado por "Cs, UPyD o Unión Alavesa"

El PP se ha fijado el objetivo de conseguir al menos un escaño más que ahora en cada una de las tres provincias vascas y ser «decisivo» en las elecciones autonómicas del próximo año, creciendo a costa del PNV pero también de Vox, cuyo voto considera «residual». Así lo señalan fuentes populares en una apuesta que coincide con la renovación del partido en el País Vasco y la llegada de Javier de Andrés a la presidencia regional, cargo que ostenta desde el pasado 4 de noviembre.

En concreto, el PP obtuvo seis escaños de la mano de Ciudadanos en las elecciones vascas de 2020 con la siguiente distribución: tres por Álava, dos por Vizcaya y uno por Guipúzcoa. De este modo, los populares aspiran a conseguir como mínimo un escaño más por cada de una de las tres circunscripciones, subiendo así su representación a 9 diputados en el Parlamento vasco, como en los comicios de 2016, según apuntan fuentes populares. 

En cuanto a la concurrencia de Vox, que logró estrenarse en la Cámara vasca con una diputada tras las elecciones de 2020, las fuentes consultadas no expresan inquietud, fundamentalmente porque, según sostienen, el «voto residual» a esta formación es el mismo que hubo en el pasado a otras siglas en esta región como «Ciudadanos, UPyD o Unión Alavesa», que fue una escisión del PP. Y es que los populares vascos, como quedó acreditado en su XVI Congreso el pasado 4 de noviembre, apostarán fuerte por pescar votos en el caladero del descontento con el PNV.

Desde Génova se ha insistido en que el PP vasco debe ser «un partido abierto y plural» y «no una sucursal de Madrid». El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha dado la consigna de que el partido ha de ser «decisivo» en el País Vasco en las elecciones autonómicas de la próxima primavera, desplegando para ello una estrategia centrada en llegar al votante del PNV. «Somos la única alternativa moderada de autogobierno», enfatizan.

También el propio Javier de Andrés, sustituto de Carlos Iturgaiz, abogó en dicho cónclave por ahormar en esta nueva etapa un «partido más autonomista», avanzando en el «autogobierno» a semejanza del PP en Galicia y tratando de desenmascarar al PNV a partir del «eje izquierda-derecha», esto es, subrayando que los nacionalistas vascos comparten la política social de Sumar y la económica de Pedro Sánchez.

Menos empleo con Sánchez

Estos años del «sanchismo» han sido «malísimos para Euskadi» porque «ha crecido menos que el resto de España, se ha creado menos empleo que el resto de España y en exportaciones también se está funcionando muchísimo peor que el resto de España y van seis meses con cifras negativas», recalcó De Andrés el viernes en rueda de prensa.

«El otro día Urkullu -que ya no será el candidato del PNV- se felicitaba en Durango por el crecimiento de las exportaciones, diciendo que habían crecido un 57%, cuando, en realidad, han crecido un 57% desde el año 2008, en 15 años y, si le quitas la inflación, que es un 36%, en todo este periodo vemos que las exportaciones prácticamente no han crecido. Y si lo comparas con lo que ha hecho el resto de España, lo que se ve es que se ha crecido la mitad que el resto de España», indicó De Andrés.

«Si hay una economía que necesita una política distinta a la socialista, es la economía vasca, que necesita inversión, esfuerzo y trabajo, y no detraer de la inversión, del esfuerzo y de las posibilidades de generación de riqueza, dinero para otros fines, que es lo que está haciendo el Partido Socialista con sus propósitos clientelares que el PNV apoya y respalda», remachó.