Opinión

Prostitución de menores tutelados en Mallorca: ni explicaciones ni dimisiones

Después de que se destapara el escándalo de un grupo de niñas que ejercían la prostitución en Palma a cambio de dinero y droga, el Gobierno socialista de Mallorca se ha visto obligado a reconocer dieciséis casos de prostitución de menores que se encontraban bajo su tutela, pese a que la última memoria oficial únicamente reconoce tres casos de explotación sexual infantil.

La abrumadora distancia entre la realidad y los datos oficiales plantea obligatoriamente la pregunta de si el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales, dependiente del Consell, tiene el control de los menores tutelados.  Obviamente, parece que no. La ONG Save the Children colocó a Baleares a la cabeza en la atención a los menores víctimas de abusos sexuales. Se supone que el informe estaba basado en datos oficiales, porque los últimos acontecimientos echan por tierra el reconocimiento de la organización en favor de la infancia.

El escándalo se destapó cuando una niña tutelada de trece años denunció haber sido violada por seis adolescentes en un piso de Palma. Según su propio testimonio, se escapó del centro para acudir a un encuentro con otros menores que, a su vez, también habían conseguido escapar de sus centros. La publicación de lo sucedido hizo que los periódicos de Baleares investigaran y encontraran la triste realidad de que no se trataba, ni mucho menos, de un caso aislado.

Lo sorprendente es que la presidenta del Consell de Mallorca, la socialista Catalina Cladera, se ha limitado a asegurar que actuará con «total transparencia» tras la apertura de investigaciones anunciada por el Defensor del Pueblo. El escándalo ha alcanzado proporciones mayúsculas, porque los 16 casos ya reconocidos podrían quedarse muy cortos. El fracaso en el control de los menores tutelados es de los que debería llevar aparejado dimisiones, pero la presidenta del Consell dice que es muy pronto para depurar responsabilidades. Lo que parece es todo lo contrario: que se ha actuado mal y tarde. Los datos oficiales dibujan un paisaje pleno de eficacia y la realidad ha demostrado todo lo contrario.