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Ni Chihuahua ni Pastor alemán: estos son los perros que peor lo pasan en las olas de calor

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

El verano ha llegado con fuerza, trayendo consigo un calor sofocante. En este contexto, los animales de compañía, que forman parte esencial de millones de hogares, están sufriendo los efectos de estas temperaturas extremas de forma silenciosa pero alarmante. Aunque muchas veces no se les presta la atención que merecen en este tipo de fenómenos climáticos, lo cierto es que los golpes de calor afectan gravemente a nuestras mascotas, en especial a los perros.

Algunas razas son mucho más vulnerables que otras y corren un peligro real durante los días más calurosos del verano. Veterinarios de todo el país están viendo un notable incremento en las consultas por cuadros clínicos relacionados con las altas temperaturas. La necesidad de proteger a nuestros compañeros de cuatro patas se vuelve urgente cuando sabemos que más de la mitad de los perros que sufren un golpe de calor severo no logran sobrevivir.

Los perros a los que más les afecta el calor

Este verano, clínicas veterinarias de todo el país han sido testigos un aumento considerable de casos en los que el calor ha sido un factor determinante en el deterioro del estado de salud de los animales. Desde mareos, jadeos intensos, vómitos hasta desmayos o fallos orgánicos, los síntomas del golpe de calor en mascotas pueden aparecer en cuestión de minutos y convertirse en emergencias médicas. En perros, el jadeo es una de las pocas formas que tienen para liberar el exceso de calor, por lo que cualquier dificultad para respirar puede ser fatal en poco tiempo.

Razas en riesgo

Sin embargo no todos los perros sufren por igual los efectos del calor. Las razas llamadas braquicéfalas (es decir, aquellas con el hocico corto y una estructura craneal particular) son las más vulnerables. Entre ellas se encuentran los bulldogs franceses, los carlinos (pugs) y los bóxers. Estos perros presentan una anatomía que complica su respiración, y como el jadeo es su principal mecanismo de regulación térmica, cualquier situación de calor extremo les resulta más peligrosa que al resto de razas.

Además de las dificultades respiratorias, estos animales suelen tener menos tolerancia al ejercicio y una capacidad limitada para adaptarse a cambios bruscos de temperatura. Basta con que estén al sol o en un espacio cerrado sin ventilación durante algunos minutos para que comiencen a mostrar signos de agotamiento térmico.

Por otro lado, los perros provenientes de regiones frías, como los huskies siberianos o los malamutes de Alaska, tampoco están preparados para resistir el calor ibérico. Su espeso pelaje, diseñado para retener el calor en climas extremos, juega en su contra cuando las temperaturas suben. Asimismo, los animales mayores, o aquellos con enfermedades respiratorias y cardíacas, tienen una mayor probabilidad de sufrir un golpe de calor severo.

Signos de alerta y cómo actuar

Reconocer a tiempo los síntomas de un golpe de calor en tu mascota puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Los perros, especialmente los de razas braquicéfalas como el bulldog, el pug o el bóxer, son muy sensibles a las altas temperaturas.

Entre los primeros signos de alarma están el jadeo excesivo, la salivación abundante, apatía, temblores, vómitos o diarrea. Si la situación avanza, pueden presentar convulsiones, pérdida de consciencia o incluso fallo multiorgánico.

En cuanto detectes estos síntomas, actúa con rapidez. Lleva a tu mascota a un lugar fresco, moja su cuerpo con agua tibia o fresca (nunca helada), especialmente en el abdomen, ingles y almohadillas. Ofrécele agua poco a poco, pero sin obligarlo a beber.

No lo cubras con toallas húmedas, ya que pueden atrapar el calor. Y lo más importante: acude al veterinario de inmediato, incluso si parece mejorar.

Medidas sencillas para proteger a tu mascota

Aunque el peligro es real, prevenir un golpe de calor en perros es posible si se toman algunas precauciones simples pero efectivas:

Nuestras mascotas son parte de la familia y dependen de nosotros para sobrevivir. Por lo tanto, ante las olas de calor, la responsabilidad de protegerlas recae en nosotros. Estar atentos a los signos de alarma y adaptar las rutinas diarias son pasos sencillos pero fundamentales para el bienestar animal en tiempos de temperaturas extremas.