5 curiosidades sobre el cuerpo de los gatos

Los gatos son unos de los animales más conocidos de todo el mundo. Su domesticación data de hace 9.500 años, y desde entonces ha tenido un lugar privilegiado en numerosas civilizaciones. Existen decenas de razas de gatos distintas, cada una de ellas con sus propias características, aunque todas tienen una serie de rasgos comunes. A continuación te contamos las principales curiosidades sobre el cuerpo de los gatos.

Huesos

A pesar de su pequeño tamaño, los gatos tienen más huesos que los humanos:230 frente a 206. Sus articulaciones son extremadamente flexibles, sobre todo la columna vertebral. Las enfermedades óseas más frecuentes en gatos son la artritis y la artrosis, y ambas suelen darse en la vejez.

Siete vidas

Se dice que los gatos tienen siete vidas, y esto tiene una explciación. Durante una caída, estos animales pueden girarse por completo con la ayuda de su cola para caer sobre las cuatro patas y así reducir el riesgo de lesión. Por esta razón, en muchos casos los mininos sufren heridas de mayor gravedad cuando caen desde alturas más bajas, porque no tienen tiempo para girarse.

Salto

Una de las curiosidades sobre el cuerpo de los gatos que muy pocas personas saben es que pueden saltar una distancia siete veces mayor a su altura. Su esqueleto es muy ligero y flexible, a la vez que robusto, lo que les dota de una gran elasticidad.

Olfato

El olfato es uno de los sentidos más desarrollados de los gatos. Tienen 200 millones de células sensibles al olor en su nariz, mientras que los humanos sólo tenemos 5 millones. Esto hace que su olfato sea hasta 14 veces más fino que el de los humanos, lo que les resulta de gran utilidad para localizar el alimento, delimitar su territorio…

Lengua

Una pregunta que muchas personas se plantean es la de por qué la lengua de los gatos es áspera al tacto. Parece que está recubierta de pelos, pero en realidad no es pelaje, sino que está cubierta por «papilas cónicas» compuestas de queratina. Además de para comer y beber, los mininos también utilizan la lengua para asearse, regular su temperatura corporal y combatir el estrés.

Como puedes comprobar, hay muchas curiosidades en torno al cuerpo de los gatos. Por último, cabe señalar que estos nimales no comprenden lo que es un castigo, pero sí las recompensas por hacer algo bien. Por lo tanto, para educar correctamente a un pequeño felino hay que aplicar el refuerzo positivo.