Madrid
CRISIS DEL CORONAVIRUS

UGT aplaza su Congreso en Madrid por seguridad ante el Covid mientras llama a manifestarse el 8M

UGT Madrid aplazó la semana pasada su 15º Congreso, previsto los días 18 y 19 de febrero, por «responsabilidad y seguridad» frente a la pandemia del Covid-19 pero, al mismo tiempo, ha llamado a acudir a las manifestaciones del próximo 8M, Día Internacional de la Mujer.

La organización sindical publicaba este jueves un manifiesto conjunto con CCOO por el 8M en el que hacen un llamamiento expreso a los «trabajadores y trabajadoras» a participar activamente «en los distintos actos, movilizaciones y manifestaciones que tendrán lugar el día 8 de marzo».

El documento, titulado «La igualdad entre hombres y mujeres en tiempos de pandemia», pide que en esas movilizaciones «se respete rigurosamente las medidas de protección de la salud pública establecidas por las autoridades sanitarias».

Sin embargo, tanto el ministerio de Sanidad como la Consejería del ramo en la Comunidad de Madrid, han desaconsejado la celebración de esas marchas por la situación de la pandemia.

La sucesora de Salvador Illa al frente de la cartera de Sanidad, Carolina Darias, ha manifestado que esas concentraciones multitudinarias no deben producirse este año por una cuestión de responsabilidad.

Por su parte, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha informado de que su departamento ha desaconsejado las tres marchas sobre las que les han pedido pronunciarse.

La Consejería no tiene potestad para autorizar o no manifestaciones, sino que se limita a evaluar las convocatorias, una a una, y emitir informe favorable o desfavorable sobre la incidencia  que puede tener su celebración en la salud pública. Es la Delegación del Gobierno en la región la que tiene la competencia de autorizarlas o prohibirlas.

El delegado, el socialista José Manuel Franco, ha autorizado las manifestaciones en Madrid de menos de 500 personas siguiendo un supuesto criterio fijado por la Consejería de Sanidad que esta ha desmentido.

«Nosotros estudiamos el riesgo real de cada una según se vaya a organizar pero no marcamos un límite por arriba o por abajo y la autorización es exclusiva de la Delegación», han explicado a OKDIARIO fuentes del departamento de Ruiz Escudero.

El manifiesto de UGT

En el manifiesto publicado ayer, UGT y CCOO alertan que la pandemia «ha evidenciado en mayor medida los desequilibrios y desigualdades de género entre mujeres y hombres y ha puesto de manifiesto importantes déficits de nuestro estado de bienestar y de protección social» y, por lo tanto, hay que luchar contra la desigualdad «con más fuerza que nunca».

El texto también destaca que, durante la crisis del Covid-19, las situaciones de violencia de género se han agravado, especialmente durante el confinamiento domiciliario.

Ambas organizaciones sindicales hacen «un llamamiento especial al valor democrático para defender la igualdad ante unas posiciones políticas ultraderechistas caracterizadas por el ataque a los derechos de las mujeres, por su antifeminismo, y por sus políticas de eliminación de recursos destinados a luchar contra las violencias machistas y a promover la igualdad».

Aplazamiento Congreso

Mientras tanto, UGT Madrid optaba por aplazar la semana pasada su 15º Congreso alegando motivos de seguridad por el Covid-19. En un comunicado, la organización explicaba que «por responsabilidad y seguridad» ante la pandemia, aplazaban sine die la celebración del Congreso.

«Nuestra comunidad autónoma ha sido una de las más castigadas por la Covid-19 y aunque parece que en estos últimos días está bajando la incidencia de contagios, estamos viviendo las consecuencias de la grave situación pandémica que hemos vivido en Madrid estas últimas semanas», señalaban mediante un comunicado.

Por ello, lamentaban, se habían visto «obligados» a suspender la celebración programada para los días 18 y 19 de febrero en su sede de Avenida de América.

«Sentimos los inconvenientes que esta decisión pueda ocasionar, pero es imprescindible en estos difíciles momentos tener la máxima responsabilidad para velar por la seguridad y salud de todos», agregaban

Una seguridad que no parece tan prioritaria si se trata de la celebración de manifestaciones multitudinarias por el Día de la Mujer y que el año pasado supusieron un importante foco de contagios en la capital.

Como tampoco es prioritaria para la ministra de Igualdad, Irene Montero, quien, a pesar de todas las advertencias sanitarias que desaconsejan las aglomeraciones, ya ha comenzado a calentar a las masas para que acudan en tropel a las calles el próximo 8 de marzo.