Madrid
Elecciones Madrid 2021

Iglesias excluye a la prensa en su gira electoral por Madrid para evitar preguntas incómodas

No permite a los periodistas la cobertura informativa de unos actos a los que ni siquiera convoca

Pablo Iglesias arranca la campaña del 4M blindado en plasma desde su sede para evitar abucheos

Pablo Iglesias se blinda: su candidatura podemita no quiere ver a la prensa. Los seis primeros actos del ex vicepresidente segundo del Gobierno como candidato a dirigir la Comunidad de Madrid han dado esquinazo a los medios de comunicación: ni convocatoria ni cobertura informativa. Los morados envían después vídeos cuidadosamente seleccionados para evitar preguntas incómodas y otras sorpresas.

El comportamiento de Iglesias es el opuesto al del resto de los candidatos, que ante un acto electoral avisan por varias vías a la prensa para que acuda y traslade a los políticos las preguntas que se hace la ciudadanía. Isabel Díaz Ayuso (PP), Rocío Monasterio (Vox), Edmundo Bal (Cs), Ángel Gabilondo (PSOE) y Mónica García (Más Madrid) no tienen inconveniente en atender a los periodistas en un corrillo. Ante las recomendaciones para evitar la difusión de la pandemia, los equipos de campaña disponen de un pie de micrófono único al que se conectan todos los informadores con distancia de seguridad. Sin embargo, Podemos distribuye a posteriori el material oficial sin dar opción a ser testigos de cómo los madrileños reciben al dirigente político.

Así, Pablo Iglesias ha estado en los últimos días en Coslada, Vallecas, Parla y Getafe siempre sin contar con la prensa. Únicamente avisa a su fotógrafo oficial del partido y a la cámara de televisión también a sueldo de la formación política. Pero ni rastro de un periodista de un medio de comunicación libre e independiente. Sólo acuden a la cita colectivos afines elegidos a dedo por Podemos.

Si alguna persona descontenta con la gestión de Podemos en el Ejecutivo central lanza sus críticas en forma de abucheos o pitos al ex vicepresidente nadie se entera. El equipo de comunicación del partido elige a su gusto los planos que más favorecen a su cabeza de cartel. En el sector de los fotógrafos y los cámaras de vídeo el malestar es palpable. Con estas prácticas que marginan a los medios de comunicación, los trabajadores gráficos se quedan sin trabajo.

En las cuatro visitas que ha realizado Iglesias únicamente tuvo un imprevisto. El encontronazo con un grupo de radicales a los que se acercó para conseguir la foto que buscaba como «antifascista».

Del mismo modo, Pablo Iglesias realiza sus mítines a puerta cerrada, sin presencia de la prensa. El acto de presentación de su lista electoral y el encuentro con Ada Colau sobre vivienda se realizaron en la sede del partido. Emitieron en directo el acto a través de las redes sociales y no dejaron entrar a los periodistas. Frente al Partido Popular que llevó a cabo la puesta de largo de su lista electoral en un parque público abierto o Vox, que lo hará este miércoles en una plaza pública en Vallecas, los morados se atrincheran tras un plasma.

El resto de candidatos atendiendo a la prensa en la precampaña electoral.

Por su parte, el candidato Pablo Iglesias reconoce implícitamente que la marca de Unidas Podemos está en claro retroceso y ha anunciado que basará su campaña en luchar contra el abstencionismo. Quiere que los que algún día votaron al partido morado acudan a las urnas el próximo 4M aunque sea para votar a PSOE o Más Madrid.

«Quiero que quienes están hartos de corruptos, en silencio, con tranquilidad, con el boca a boca… haga el sencillo acto de votar. Consigamos que todo el mundo se pueda dar ese gusto de responder a las provocaciones con papeletas. Tenemos que sumar las tres candidaturas, con una actitud cooperativa podemos ganar», relató el líder morado.

«Estamos cansados de las barbaridades que dicen en la televisión. Nosotros no vamos a buscar el enfrentamiento», aseguró Iglesias a pesar de que su llegada a la política se ha basado precisamente en confrontar con la derecha de todas las formas posibles. «El día 4 vamos a ir sin hacer ruido a dejar la papeleta para que las izquierdas gobiernen en Madrid. No vamos a soltar pullitas [contra el PSOE y Más Madrid]. El mayor factor que desmoviliza a los barrios humildes es pegarnos entre nosotros. En cada entrevista que me hacen intentan buscarme las vueltas para que diga algo contra el resto de candidaturas que son necesarias para armar un Gobierno de cambio, pero no diré ni una palabra», comentó el ex vicepresidente.