Investigación

La Policía investiga a Cándido Conde Pumpido jr. por blanquear millones de un macroprostíbulo en su cuenta

La Policía investiga al abogado Cándido Conde-Pumpido Varela, hijo del que fuera fiscal general del Estado bajo el Gobierno de Rodríguez Zapatero, por blanquear presuntamente a través de una cuenta suya del BBVA millones de euros procedentes de uno de los grandes prostíbulos de Madrid.

Como letrado, Conde-Pumpido jr. asumió la defensa de varios socios de una macrosala de alterne denominada «Vive Madrid», que fueron imputados por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu en la Operación Pompeya.

El magistrado ordenó detener a 66 personas, registrar 14 clubes de alterne e intervenir 800 cuentas bancarias, en una operación desarrollada el pasado mes de agosto por agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera y de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) de la Policía Nacional. Los registros se llevaron a cabo en establecimientos de Madrid, Alicante, San Sebastián y la Junquera (Girona), en los que trabajaban cerca de 2.000 mujeres.

Desde un primer momento, las investigaciones se centraron en una empresa de Gipúzcoa, Larratruk, que suministraba los datáfonos empleados en estos establecimientos para cobrar los servicios sexuales a sus clientes. Un servicio de cobros telemáticos que las entidades financieras se negaban a prestarles, para evitar incurrir en actividades de blanqueo de capitales procedentes de una actividad ilegal.

Según la investigación judicial, Larratruk lavó cerca de 400 millones de euros procedentes de los prostíbulos de la red, a cambio de quedarse con una comisión próxima al 10% de la facturación. Todo ello se habría traducido en una fraude a la Hacienda pública que ronda los 115 millones de euros.

El hijo del ex fiscal general del Estado Cándido Conde-Pumpido asumió la defensa de varios de los imputados en esta causa, que son socios del «Vive Madrid», un macroprostíbulo situado en la calle Marqués de Viana, en el que prestan servicios sexuales 200 mujeres.

El establecimiento se ubica en un edificio de varias plantas, que antiguamente acogía el cine Savoy, próximo a la calle Bravo Murillo. Está gestionado por la sociedad Viveviana 15 SL, cuyo principal accionista es Ángel Crispín G.V.

Según fuentes próximas a la investigación consultadas por OkDiario, el BBVA emitió una alerta a la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales (SEPBLAC) del Banco de España, al detectar en una cuenta perteneciente a Conde-Pumpido Varela movimientos de dinero millonarios de procedencia presuntamente ilícita.

Imputados en la Operación Pompeya

En el marco de la operación policial, el juez Fernando Andreu había bloqueado todas las cuentas bancarias de los socios del «Vive Madrid». Siempre según las mismas fuentes, uno de estos empresarios habría utilizado una cuenta del BBVA, en la que Conde-Pumpido aparece como titular, para transferir fondos procedentes de cobros de sus clientes. El Banco de España ha comunicado estos hechos a la Policía Judicial que, a su vez, ha informado al juez Andreu.

A preguntas de este diario, Cándido Conde-Pumpido confirmó anoche que su despacho tiene una cuenta en el BBVA que ha recibido «transferencias» procedentes de los empresarios del sector de la prostitución a los que representa como letrado en la Operación Pompeya. No obstante, aseguró que estos fondos corresponden exclusivamente a sus honorarios como letrado y señaló que el movimiento de dicha cuenta no ha superado el millón de euros en el último año.

Conde-Pumpido Varela consideró injusto que el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu haya bloqueado todas las cuentas de las distintas sociedades vinculadas a los imputados en la Operación Pompeya, ya que estos empresarios, alegó, también tienen algunos negocios legales en sectores como la hostelería y necesitan seguir pagando a sus empleados y cobrando a sus clientes.

Por este motivo, indicó el letrado, acompañó a sus clientes al BBVA para solicitar que les abrieran una nueva cuenta. Como esta entidad se negó, les asesoró para realizar la misma gestión en otro banco que, esta vez sí, accedió a abrirles un depósito.

Conde-Pumpido añadió que si hubiera permitido a los socios del «Vive Madrid» usar su cuenta para cobrar a clientes de sus negocios de la prostitución, «tampoco sería blanqueo, sino una simple gestión de cobros que es una actividad completamente legal, como la que hacen todos los bancos».

Beligerante con jueces y fiscales

Pese a su juventud -apenas tiene 35 años-, el abogado Conde-Pumpido Varela ya se ha hecho notar en las causas que ha asumido como letrado por la extraordinaria beligerancia demostrada ante los magistrados y fiscales.

Su caso más sonado ha sido la defensa del juez Elpidio José Silva, inhabilitado por encarcelar de forma injustificada al ex presidente de Caja Madrid Miguel Blesa. En esta causa, impulsó una denuncia contra el juez instructor del Tribunal Superior de Justicia Jesús Gavilán y contra el fiscal Manuel Moix. También ha actuado como defensor de la ex presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, en la querella que Podemos interpuso contra ella.

Su despacho profesional, Conde-Pumpido & De Porres, también ha participado en procesos como los casos Gescartera, Malaya y el Saqueo 2 de Marbella, que le llevó a protagonizar un agrio enfrentamiento con el magistrado Alfonso Guevara.

Su padre, Cándido Conde-Pumpido Tourón (La Coruña, 1959) fue fiscal general del Estado entre 2004 y 2011, bajo los Gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero. Antes había sido magistrado en el País Vasco y fundador de Jueces para la Democracia.