Irene Montero politiza el éxito de la Eurocopa exigiendo «el fin de las redadas racistas»

«España feminista, España antirracista. ¡Viva España!». Don ese comentario celebraba la actual eurodiputada de Podemos, Irene Montero, el triunfo de la selección española en la final de la Eurocopa 2024 ante Inglaterra. La ex ministra de Igualdad usó de nuevo al combinado español para lanzar mensajes políticos, de nuevo relacionados con el orgullo feminista y antirracista como estos días atrás con otros triunfos de España.

«Su madre se jugó la vida en la valla de Melilla. Si te parece inhumano lo que cuenta Nico Williams, no se lo hagamos a nadie más. Fronteras de acogida y no de concertinas, fin de las redadas racistas y regularización ya. Ningún ser humano es ilegal», defendía en sus redes sociales Irene Montero, acompañado su mensaje de un vídeo en el que Nico relata la historia de su madre y las dificultades que vivió para llegar a España.

No es esta la primera vez que habla Montero durante todo el torneo sobre fútbol y política, mezclando el buen hacer de la selección española durante todo el torneo y su foco mediático con sus intereses políticos. La eurodiputada ya lanzó con anterioridad un mensaje en torno a Lamine Yamal colocándole como un ejemplo de «orgullo antifascista» y «orgullo antirracista» pese a que el joven de tan solo 17 años recién cumplidos no haya lanzado ningún tipo mensaje político o ideológico desde que irrumpió en la élite del fútbol con el Barcelona.

También aprovechó tras el triunfo de España en semifinales ante Francia para lanzar otro mensaje político… aunque con un error garrafal. Irene Montero confundió a Dani Olmo con Nico Williams, ejemplificando que no vio el partido o que su conocimiento del fútbol es más bien escaso, llegando a eliminar el vídeo que compartió con el siguiente mensaje: «Estoy muy contenta porque ayer la selección masculina de fútbol hizo que España pasase a la final de la Eurocopa. Y los dos goles los marcaron dos personas racializadas, personas que normalmente reciben el odio, el racismo de una parte de la sociedad, también de las instituciones. Un racismo que lo asocia con la inmigración y a las personas racializadas falsamente con la delincuencia y que les criminaliza».