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El sobeteo de Yolanda Díaz a Lula que desconcierta al propio presidente brasileño

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, acudió a la toma de posesión del corrupto Lula Da Silva como presidente de Brasil. Díaz siempre ha apoyado públicamente al mandatario brasileño, prueba de ello fue la efusividad que mostró para saludarle personalmente. Al presidente latinoamericano se le vio desconcertado por momentos ante la efusividad de Díaz. El Rey Felipe VI, que también asistió a la toma de posesión, mostró una sonrisa durante este gesto, al igual que el resto de presentes.

La también ministra de Trabajo compartió este momento en las redes sociales, asegurando que la victoria de Lula Da Silva en las pasadas elecciones brasileñas «fue la victoria del sentido común y la democracia». «Su toma de posesión es un momento especial para todas las que creemos en la posibilidad de construir sociedades más justas e integradoras. Hay esperanza, en Brasil y en el mundo. Democracia Siempre», señaló Yolanda Díaz.

Lula Da Silva juró su cargo como 39º presidente de la República de Brasil, iniciando así su tercer mandato al frente del país latinoamericano. Este lunes ha mantenido un encuentro con el Rey Felipe VI, que ha estado acompañado por Yolanda Díaz y por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. Este encuentro ha tenido lugar en el Palacio de Itamaraty, sede del Ministerio de Asuntos Exteriores de Brasil.

La vicepresidenta segunda del Ejecutivo también ha aprovechado esta reunión para sacarse otra foto con el mandatario brasileño. «La presidenta de Lula Da Silva representa el inicio de un tiempo de derechos, de igualdad, alegría y de dignidad para el pueblo brasileño. Un nuevo Gobierno al que saludamos en España y al que deseamos toda la suerte y aciertos. Adelante, querido Lula», ha remarcado.

Corrupción

Lula Da Silva fue condenado en julio de 2017 a 9 años y 6 meses de prisión por corrupción y lavado de dinero. Fue acusado de recibir sobornos de OAS S.A., grupo brasileño que ofrece servicios de construcción civil y pesada, en forma de reserva y renovación de un departamento en el balneario de Sao Paulo. Aunque la propiedad nunca perteneció a Da Silva, la Fiscalía alegó que el trato se disolvió después de que se hiciera público el asunto, y por eso nunca llegó a concretarse.

Esta condenada fue confirmada por el Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región, en enero de 2018, y que aumentó la pena a 12 años y un mes de prisión. En abril de 2019, el Tribunal Superior de Justicia decidió mantener la sentencia, pero la redujo a 8 años, 10 meses y 20 días de cárcel.

Después, Lula Da Silva también fue condenado a 2 años y 11 meses de prisión por corrupción y lavado de dinero. Fue acusado de recibir sobornos de las constructoras OAS S.A. y Odebrecht a través de remodelaciones que se hicieron en su casa de Sao Paulo. La Fiscalía aseguró que él era el propietario real del sitio y su usuario principal. Esta condena fue confirmada en segunda instancia en noviembre de 2019. Además, fue elevada a 17 años, un mes y 10 días de cárcel, aparte de una multa.