España

Rajoy ordena «más calle» en Cataluña para contrarrestar el independentismo

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha ordenado a sus cuadros en Cataluña incrementar su presencia «en la calle» para acercar el proyecto del PP a los ciudadanos y contrarrestar el discurso independentista.

La movilización- que encabeza el nuevo presidente del PP catalán, Xavier García-Albiol- forma parte de la estrategia para movilizar al partido y hacer visible la labor del Ejecutivo.

Pero, en el caso catalán con una doble intención. Además de fortalecer la imagen del PP en Cataluña, urge replicar el mensaje de los independentistas que, reconocen en el partido, tiene un indudable calado a nivel territorial. «Hay que insistir en el argumento sentimental», sostiene el propio García Albiol, que ha programado una agenda repleta de actos para el próximo mes de mayo.

Su intención es visitar, hasta en dos ocasiones, las principales localidades de Cataluña. Para ello, se movilizará a todo el aparato regional y municipal. Y también, cuando sea posible, se contará con el propio Rajoy y con la plana mayor de Gobierno y partido, como la secretaria general, María Dolores de Cospedal.

Los ‘populares’ admiten que en el «terreno de la identidad» los independentistas han logrado una ventaja, apoyándose en argumentos falsos, como la prosperidad en una eventual Cataluña independiente o la entrada en la Unión Europea, desmentida por las propias autoridades comunitarias.

«No solo el PP, tampoco PSOE ni Ciudadanos han conseguido hasta ahora superar el arraigo», que sí tienen los secesionistas, concluyen desde el partido. El mensaje se asentará así en la necesidad de un poder «sensato» para consolidar la recuperación económica y la creación de empleo, aunque también se rebatirán con argumentos las tesis secesionistas. «Nosotros tenemos la legalidad de nuestra parte», se sostiene en el PP, donde observan cómo, a medida que la burbuja independentista se desinfla por la «frustración ante el referéndum», los partidos secesionistas se van «radicalizando».

También Rajoy se volcará en los próximos meses con Cataluña. La presencia del presidente del Gobierno tendrá, eminentemente, un cariz económico. Acudirá al acto organizado por Foment del Treball, la principal patronal catalana o las jornadas del Cercle d’Economía, en Sitges. Dos actos a los que Rajoy no falla y que suponen un relevante punto de encuentro y debate con la clase empresarial, una de las prioridades para el jefe del Ejecutivo.

Moncloa hace así compatibles una agenda más institucional-con participación en los principales foros y encuentros de la sociedad civil-con otra «de cercanía» social, ambas imprescindibles.

La táctica se dirige a reforzar el poder territorial, de cara a las elecciones municipales y autonómicas de 2019. Una penetración mermada, reconocen los ‘populares’, que en los pasados comicios llegaron a perder en Cataluña a casi la mitad de sus concejales.

La difícil convivencia con C’s

En el PP catalán hacen visible también su malestar hacia Ciudadanos por lo que consideran el «giro nacionalista» de este partido, en busca del voto de la antigua Convergencia.

La convivencia entre ambos partidos es complicada, en tanto los populares recelan de la formación, que en Cataluña representa Inés Arrimadas, por intentar atraerse a ese votante con un mensaje ambiguo «que impide un mensaje claro alternativo frente al nacionalismo».

Una polémica avivada tiempo atrás, cuando Arrimadas aseguró que votaría en un «referéndum legal y con validez». Aunque la dirigente catalana matizó después esas palabras, la aseveración dio un argumento más al PP para dudar de su compromiso con la «unidad» entre Cataluña y el resto del Estado.

La bronca continuó después, cuando Arrimadas acudió a Madrid para una reunión con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Albiol consideró que se había apropiado de una propuesta suya a PSC y Ciudadanos para hacer un «frente común» con el Gobierno tras la negativa de Puigdemont de acudir a la Conferencia de Presidentes.

No obstante, dirigentes de las tres formaciones dieron una imagen de unidad esta mismo martes, en el debate ‘¿Qué está pasando en Cataluña?’. organizado en Madrid por Societat Civil Catalana (SCC).

En el acto, desmontaron los mitos y bulos del independentismo que, consideran, ha conducido a Cataluña a un escenario «prefascista». Allí, la vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, consideró que «lo que ha sucedido en Cataluña es que algunos han querido jugar desde el poder político con el discurso de las identidades. Y cuando se juega con el discurso de las identidades se juega con fuego».

«Hay que ganarles en las urnas. Hay que mirarles a los ojos y decirles: la hegemonía nacionalista han llegado a su fin», añadió Juan Carlos Girauta, portavoz parlamentario de Ciudadanos.

Por parte del PSOE, Josep Borrell admitió que los sucesivos Gobiernos no habían sabido responder al problema catalán. «No han contrapuesto la información necesaria a la propaganda», consideró.