España

Macron rechaza una mediación europea porque equipararía a Rajoy y a Puigdemont

El presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, ha avisado este martes de que la UE no puede mediar en la crisis entre los independentistas catalanes y el resto de España, una opción que supondría tratar «en pie de igualdad» a ambas partes. Eso sí, ha confiado en que haya una salida pacífica al conflicto.

«¿Por qué Europa, Francia o Alemania, no intervienen en el asunto catalán? Porque Europa está hecha por Estados soberanos», ha dicho en un debate sobre Europa en la universidad Goethe de Francfort (Alemania).

«Si interviniese en el asunto catalán me inmiscuiría en los asuntos domésticos españoles y eso es intolerable tanto para el presidente del Gobierno como para el monarca español», ha añadido.

«Podemos decir que ‘Mariano Rajoy ha reaccionado así o asá’, no me corresponde a mí juzgarlo, pero el paso que ha dado Cataluña no se enmarca en las reglas del Estado de Derecho español», ha proseguido Macron.

Así, ha defendido que «un Estado vecino no puede inmiscuirse en estos asuntos y decir ‘voy a explicarte como se hace, voy a hacer una mediación». «Eso no puede hacerlo ya Europa, no es el papel de Europa, es España quien tiene que hacerlo», ha remachado.

Macron ha explicado que si la UE interviniese eso supondría tratar como iguales al presidente catalán, Carles Puigdemont, y a Mariano Rajoy y eso además abriría una caja de Pandora en otros países europeos. Así, ha dejado claro que, como «jefe de Estado vecino y amigo», él no puede «reconocer en pie de igualdad» a ambos, y tampoco pueden hacerlo las instituciones europeas.

En su opinión, lo que hay es «un golpe de fuerza» de dirigentes catalanes y espera que «se gestione en paz, de la manera más conforme a nuestras prácticas». Es más, está convencido de que así será: «Confío en ello por haber hablado mucho a unos y a otros», ha añadido.

El presidente francés también ha dicho ver en la situación de Cataluña un «irredentismo» que tiene «acentos culturales sinceros y profundos» que ha dicho respetar, pero también a veces un «egoísmo económico» que le «da miedo» y una irresponsabilidad que no comparte. «Yo no sé, desde donde estoy, separar el grano de la paja, así que creo es que es el papel (de Mariano Rajoy)», ha añadido.