Iglesias usa la Moncloa para publicitar las mascarillas de la marca de su dircom

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha utilizado este martes el Palacio de La Moncloa para hacer publicidad de las mascarillas que vende la marca de ropa que creó su director de comunicación, Juanma del Olmo. Para hacer caja con la pandemia, esta empresa ha elaborado mascarillas antifascistas, republicanas y a favor de la Sanidad pública. Este último ha sido el modelo que ha lucido el líder de Podemos.

Pablo Iglesias, que tardó varias semanas en dejarse ver con mascarilla, ahora ha optado por usar este producto para su batalla ideológica y de paso beneficiar el negocio de ‘Uno Nueve Ocho’, la tienda creada por el jefe de prensa de Podemos conocida por comercializar guillotinas o publicitar los lemas ‘Almeida Carapolla, Ayuso Caracoño’.

Ahora, el también ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030 se ha colocado una mascarilla azul con el lema «Sanidad pública» en el Complejo de La Moncloa. De esta forma, Pablo Iglesias menosprecia a la Sanidad privada, que también ha llevado a cabo esfuerzos inhumanos para tratar de contener la pandemia del coronavirus.

En las imágenes oficiales que ha distribuido el Gobierno, Iglesias luce esta mascarilla de marca en el minuto de silencio que ha guardado el Consejo de Ministros y al entrar en la sala de prensa antes de comparecer ante los periodistas para dar cuenta de la nueva Ley de Protección a la Infancia.

El líder del partido morado es aficionado a impregnar de política cualquier ámbito de la vida cotidiana. También abogó por la premisa de «politizar el dolor» y desde entonces está aprovechando los fallecimientos por coronavirus para obtener réditos electorales e impulsar su agenda de reformas de izquierda radical.

A casi 8 euros

Se trata de la marca de ropa favorita de Pablo Iglesias. En momentos importantes de su carrera política, como fueron los debates electorales, el profesor universitario no ha dudado en confiar su imagen a la empresa fundada por Juanma del Olmo. Así mismo, también lució una camiseta de esta marca con los colores republicanos mientras jugaba una pachanga de fútbol en una jornada de reflexión antes de unas elecciones.

Esta empresa textil llamada ‘198’ no ha querido pasar la oportunidad de lucrarse con el drama del coronavirus. Ha lanzado a la venta una línea especial de mascarillas contra el Covid-19 de temática «antifascista, republicana, antipatriarcal, LGTB, comunista y feminista», según su propia definición. A la ropa para hombre y mujer, a su gama de calzado y a los accesorios, esta marca ha sumado el apartado «mascarillas». Así se puede comprobar en su página web.

Por casi ocho euros, la compañía distribuye ‘mascarillas de diseño’. Las hay moradas con el lema en inglés «feminist», con la bandera tricolor rojo, amarillo y morado a favor de la República, con símbolos que aluden al ‘Guernica’ de Picasso o a la artista mexicana feminista Frida Khalo.

También hay mascarillas con el mensaje «Sólo podemos vencer», con el emblema de las Brigadas Internacionales (los batallones comunistas que lucharon en la Guerra Civil española junto a las tropas republicanas), con el triángulo rojo invertido en alusión al comunismo o con un diseño contra «el patriarcado».

Desde la empresa aseguran que estos artículos están homologados, pero que «no son un producto sanitario en el sentido de la directiva 93/42 o el reglamento de la Unión Europea de 2017/745, ni un equipo de protección individual» (EPI). Este género se vende bajo el texto «mascarilla lavable y reutilizable de tejido homologado de talla única». Se trata, por tanto, de un modelo de tela que ni es tipo higiénica (FFP1, FFP2, FFP3 y similares), ni de tipo quirúrgica (las que recomienda para personas sin síntomas el Gobienrno).

Esta empresa ha protagonizado ya varias polémicas. Por ejemplo, por vender guillotinas «porque hacen falta recortes» o tras lanzar el mensaje «Almeida carapolla, Ayuso caracoño» en sus redes sociales y en las paredes de su tienda. Una apelativo ofensivo contra el alcalde de Madrid y la presidenta de la Comunidad.