España

ERC cambia de consigna sobre Puigdemont: «Todos somos necesarios, pero nadie imprescindible»

El portavoz de Esquerra en el Congreso, Joan Tardà, ha dicho hoy que desde ERC intentarán por todos los medios formar un nuevo Govern presidido por Carles Puigdemont en el que Oriol Junqueras sea vicepresidente, pero ha advertido que en el camino hacia la República «todo el mundo es necesario, pero nadie es imprescindible».

En una entrevista en TV3, Joan Tardà ha considerado que Puigdemont «es y será el presidente legítimo de Cataluña y Junqueras el vicepresidente legítimo de un gobierno que fue elegido democráticamente», por ello desde ERC harán lo imposible para que vuelvan a ser elegidos en sus cargos tras la constitución del nuevo Parlament, «lo que no quiere decir que lo podamos conseguir».

Tardà ha subrayado que para ERC «lo prioritario ahora es que haya un Govern independentista que traslade la voluntad popular expresada el 21-D» y ha considerado que «nunca habíamos llegado tan lejos, nunca habíamos sido tantos los independentistas, hemos llegado al pie de la montaña y nos falta alcanzar la cumbre», objetivo para el que «nos hacen falta nuevas personas que tomen el relevo».

«Nos tendrían que meter en prisión si no hay govern»

«Lo que nos urge ahora -ha insistido Tardà- es constituir el Parlament y tener un gobierno de progreso que recupere las instituciones del autogobierno y políticas sociales progresistas y comenzar a subir la montaña para llegar a la cumbre de la independencia».

Ha recordado que ahora la Generalitat «está en manos de Rajoy y están intentando desmontar todo lo que pueden antes de que se forme el nuevo Govern» independentista, a cuyo frente «me es igual quién esté», pero que, ha estimado, «debe recuperar las instituciones y hacer políticas de progreso para construir la República».

Para Tardà, la eventualidad de no poder formar un Govern independentista con Junts per Catalunya «sería jugar a la ruleta rusa, seria un suicidio político, nos tendrían que meter en prisión», pues daría «una segunda oportunidad para hacernos daño y derrotarnos en las urnas» a los partidos no independentistas, y «la ciudadanía no nos lo perdonaría».