El des-Gobierno del coronavirus: Sanidad avaló los consejos de Trabajo que Moncloa ha desautorizado

• Luz Sela
• Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.
• • 05/03/2020 18:33
  • Actualizado: 05/03/2020 18:33

El Ministerio de Sanidad avaló la guía del Ministerio de Trabajo que aconseja «paralizar la actividad laboral» en aquellas empresas «con riesgo grave e inminente de contagio». Moncloa se apresuró este jueves a desautorizar al departamento que dirige Yolanda Díaz (Podemos), tras la polémica generada. Según el Gobierno, las indicaciones sobre la evolución del coronavirus y las medidas a adoptar en España las gestiona directamente el Ministerio de Sanidad en «coordinación total entre las distintas administraciones del Estado».

Sin embargo, el jueves, el perfil oficial del Ministerio de Salvador Illa (PSOE) se hizo eco de esta guía. También se difundió desde la cuenta oficial del Gobierno sobre Salud Pública, en la que se recogen las recomendaciones sobre la epidemia.

Fuentes de La Moncloa, recogidas por Europa Press, explicaron este jueves que todo el Ejecutivo «sigue las indicaciones concretas» del departamento que dirige el socialista Illa y que «se basan en un seguimiento constante de la situación, transparencia informativa y toma de decisiones de acuerdo a la evidencia científica». Las mismas fuentes recordaron que los organismos internacionales divulgan medidas de carácter general desde la aparición del virus, el Covid-19.

Críticas de patronales

La reacción de Moncloa se produjo después de que las patronales CEOE y Cepyme calificasen de «un grave error» que se difundiesen pautas de actuación en el ámbito laboral porque genera «alerta y confusión». En opinión de las patronales, las advertencias no se corresponderían con la valoración de riesgo que hasta ahora ha realizado Sanidad. Además, se quejaron de que para su elaboración no se había contado con la participación ni de empresas ni de sindicatos.

La circunstancia supone un nuevo choque entre el PSOE y sus socios de Podemos, aún en plena polémica por los desacuerdos sobre la ley de libertades sexuales de Irene Montero. En los últimos días, ambos partidos han mostrado sus discrepancias sobre otros asuntos, como la política de inmigración y las llamadas ‘devoluciones en caliente’.

Polémica guía

Según las indicaciones de Trabajo, las empresas podrían paralizar su actividad laboral si existe riesgo de contagio por la enfermedad. Tanto la empresa como los delegados de prevención podrían tomar la decisión de abandonar el centro de trabajo en caso de «riesgo grave e inminente» de contagio, determinado en una valoración basada en «hechos fehacientes».

El departamento de Yolanda Díaz recomendaba, no obstante, apostar en primer lugar por medidas que permitan el desarrollo de la actividad laboral de forma alternativa o bien, si es necesario, la adopción de medidas de suspensión temporal de la actividad.

El Ministerio recuerda en su guía que cuando las trabajadores estén, o puedan estar expuestos, a un riesgo «grave e inminente» en su puesto laboral, la compañía deberá informar lo antes posible y adoptar medidas necesarias para que se pueda interrumpir la actividad y, si fuera necesario, «abandonar de inmediato el lugar de trabajo».

Así, Trabajo destaca que los trabajadores y sus representantes «no podrán sufrir perjuicio alguno derivado de la adopción de estas medidas», a menos que hubiesen obrado de mala fe o cometiendo una negligencia grave.

Asimismo, el Ministerio señala que el teletrabajo podría adoptarse, por acuerdo colectivo o individual y de carácter excepcional, como una medida para desarrollar las tareas imprescindibles que pueden desarrollarse en el centro físico habitual.

También se aborda la suspensión total o parcial de la actividad mediante un expediente de regulación de empleo (ERE) por la escasez o falta total de aprovisionamiento de recursos necesarios para el desarrollo de su actividad o por un descenso de la demanda, el ERE podrá ser de suspensión total o parcial de la jornada o de reducción de la misma.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha calificado el dossier de Díaz de «compilatorio» de normas, aunque ha descartado que se trate de un protocolo que, en cualquier caso, dependería de su Ministerio. Illa ha hablado hoy de una «fase de contención», lo que rebaja la aparente alerta.

Iglesias defiende a Díaz

«Es una transcripción de las normas que están en nuestro ordenamiento vigente. Creo sinceramente que los interlocutores sociales saben que si fuera necesario adoptar medidas excepcionales obviamente serán negociadas con ellos», ha dicho por su parte la propia ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. 

Otros ministros del PSOE han salido también en línea con Moncloa. La portavoz, María Jesús Montero, ha considerado que las propuestas tendrán que estar «bajo el paraguas» de Sanidad, incluidas las de «empresas o economía». Isabel Celaá, ministra de Educación, también ha asegurado que se plegará a lo que diga Sanidad.

El vicepresidente Pablo Iglesias ha defendido el «gran trabajo» de Díaz para «recuperar y ampliar derechos laborales».