España
Transición Ecológica

El 80% de las adjudicaciones del Gobierno a la empresa del hermano de Aagesen son contratos ‘a dedo’

Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU ha obtenido en seis años al menos 106 contratos, de los que 87 fueron menores

La vicepresidenta tercera sostiene que "nunca he favorecido la contratación o subvención a ningún particular"

El 80% de las adjudicaciones del Gobierno de Pedro Sánchez a la empresa del hermano de mayor de la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, son contratos menores, es decir, otorgados a dedo. Así se desprende de un análisis de los más de cien expedientes otorgados por el Ejecutivo a esta compañía desde que el líder del PSOE accedió a la Moncloa, tal y como ha revelado en exclusiva OKDIARIO.

Contando tanto estos contratos menores, como los dos expedientes revelados por este periódico en estos días (uno de 114.466 euros, y otro de 134.514), la cifra de concesiones a esta compañía del sector de la instrumentación acústica por parte de la Administración Sánchez supera ya los 2,8 millones de euros.

Con la llegada de los socialistas al poder a mediados de 2018, Sara Aagesen fue nombrada asesora del Gabinete de su antecesora al frente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la hoy comisaria europea Teresa Ribera. Entre enero de 2020 y el pasado 24 de noviembre, Aagesen fue secretaria de Estado de Energía en esta cartera.

Según la información existente en el Portal de Transparencia de la Administración General del Estado (AGE), Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU ha obtenido en estos seis años al menos 106 contratos del Gobierno central, de los que 87 fueron menores, es decir, en torno a un 82%. En cambio, en los últimos cuatro años del Ejecutivo de Mariano Rajoy, la compañía apenas se hizo con 36 adjudicaciones por un valor de 363.000 euros.

Los dos últimos de estos contratos menores identificados por este periódico fueron adjudicados por la empresa pública Isdefe y por el CIEMAT con un valor de 2.420 euros y 2.649,54 respectivamente.

Los contratos menores son aquellos que se otorgan sin necesidad de un concurso público en el que tener en cuenta diferentes criterios, no sólo el precio más bajo. En su caso, responden a un valor estimado inferior a 40.000 euros cuando son contratos de obras, mientras que el valor debe ser inferior a 15.000 euros cuando se trata de contratos de suministro o de servicios, como ha ocurrido con estos expedientes concedidos a Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU, sin libre concurrencia de otras empresas. Harald Aagesen, hermano de mayor de la ministra, es director de ventas de esta compañía desde 2020 y señala en su currículum que está vinculado a ella desde 1997.

Bajo mandato de Pedro Sánchez, de los al menos 104 contratos analizados, fueron 77 los otorgados por el Ministerio de Defensa por un valor total de 2.250.129 euros. La mayoría de ellos fueron suscritos por el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA). A estos expedientes hay que sumar los concedidos por otros seis ministerios y organismos adscritos, como, el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX), adscrito al Ministerio de Transportes; el Centro Español de Metrología (CEM) del Ministerio de Industria; el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) del Ministerio de Ciencia; el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) del Ministerio de Trabajo; Equipos Nucleares SA (ENSA), dependiente del Ministerio de Hacienda vía SEPI, o la Jefatura de Asuntos Económicos de la Guardia Civil del Ministerio del Interior.

Se han contabilizado aquí los contratos recibidos tanto por Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU como por las empresas que conformaron esta fusión a finales de 2019. En esta fecha, la firma Brüel & Kjaer España SL y la conocida como Hottinger Baldwin Messtechnik Ibérica SL -constituida en España en 2002- se fusionaron en Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU. Ambas eran empresas hermanas dentro del grupo Spectris, de capital británico, que destacó que esta fusión serviría para «reforzar nuestra posición dentro del mercado de ensayos y medida».

«La combinación de nuestras capacidades, nuestros recursos y nuestro equipo humano nos permitirá ofrecerles una plataforma integrada de ensayos, medida y simulación que les ayudará a capitalizar nuevas oportunidades de desarrollo», decía el grupo.

En efecto, los contratos públicos que pasó a recibir la nueva Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU, con el hermano de Sara Aagesen como director de ventas, se multiplicaron con respecto a los años anteriores. Harald Aagesen Muñoz valoraba la nueva etapa de la compañía de este modo: «Los clientes ya se están beneficiando de las soluciones a medida de la nueva HBK en proyectos de seguridad crítica para los dominios de la propulsión, la durabilidad, el ruido y la vibración. Consecuencia de la apuesta por la innovación, nuestros productos están presentes desde hace muchos años en los proyectos más vanguardistas de sectores como el aeroespacial y el del transporte, entre otros muchos», remarcó.

El padre de Sara Aagesen

El padre de la ministra, también de nombre Harald Aagesen y nacido en Birkerod (Dinamarca), comenzó a trabajar en Brüel & Kjaer Ibérica en el año 1975, siendo el director general de la sociedad en España hasta diciembre de 2008. Falleció en agosto de 2009. Su hijo mayor, Harald, continuó la saga familiar en este negocio y desde 1997 ya se enroló en la compañía de su padre, una de las dos sociedades fusionadas en la actual Hottinger Brüel & Kjaer Ibérica SLU.

El otro hermano de la vicepresidenta tercera del Gobierno, Erik Aagesen, trabaja en Te Consulting House 4 Plus SL, la empresa cofundada por el marido de la ministra, Diego Fernández-Polanco, que también ha recibido subvenciones y préstamos del Ejecutivo de Sánchez en estos años por valor de al menos 375.000 euros, como informó este periódico. Por ello, la suma de todas concesiones del Gobierno a negocios del círculo familiar de la ministra alcanza ya los 3,2 millones de euros desde junio de 2018.

El pasado martes, el senador del PP Fernando Martínez-Maíllo exigió explicaciones a Sara Aagesen por estos contratos y ayudas en la sesión de control celebrada en la Cámara Alta. Martínez-Maíllo denunció que la dirigente socialista «no se puede ser vicepresidenta de un Gobierno que concede millones y millones a empresas de su familia».

«En cualquier país democrático, esto sería inviable, una vicepresidenta en el Gobierno es incompatible con unas cantidades de dinero tan desorbitadas, concedidas a sus familiares», advirtió.

Por su parte, la ex secretaria de Estado de Energía replicó que «nunca jamás, en ninguna de mis funciones, he favorecido la contratación o subvención a ningún particular», y esgrimió que «mi familia siempre ha trabajado de manera honrada».