Economía
IX CONGRESO FRENTE AL CONTRABANDO

Sanidad exigirá cajetillas genéricas de tabaco aunque fracasaron en Francia: fomenta el contrabando

La propuesta de Sanidad contradice al propio Consejo de Ministros

  • Jose de la Morena
  • Jose de la Morena, periodista especializado en economía desde hace más de 15 años, desarrolla su labor en el campo de la comunicación desde el prisma de las tendencias, los números y resultados de las distintas compañías. Una tarea que le ha llevado a conocer a fondo el mundo empresarial. Ha trabajado también en comunicación corporativa y como asesor para distintas marcas internacionales e institucionales.

El ministerio de Sanidad planea ir más allá de lo que acordó ir en el Consejo de Ministros cuando, entre las cuestiones que abordaban al tabaco, se dejó de lado el imponer la famosa cajetilla genérica, que obliga a todas las marcas a realizar las mismas cajetillas de tabaco, para «desincentivar el atractivo visual» que puedan tener; algo que ha demostrado que, en realidad, incrementa el contrabando de tabaco.

Lo cierto es que el Gobierno atendió entonces las demandas del sector, que en varias ocasiones ha explicado que «facilitaría el contrabando y la venta de tabaco falsificado», pero el ministerio de Sanidad sigue empeñado en ir más allá. El ejemplo perfecto de lo sucedido con esto lo encontramos en Francia y, más allá de las demandas del sector, los datos están del lado de las tabaqueras porque fomenta el consumo de tabaco de contrabando.

Francia como ejemplo negativo

El comercio ilícito ha pasado en Francia del 21,7% en 2017 a un 44,7% en la actualidad, debido a las subidas de impuestos y al empaquetado genérico, que facilita su copia.

Francia ha duplicado sus precios y ha obligado a tener un empaquetado genérico. Una doble medida que buscaba disuadir a los consumidores y hacer menos atractiva la compra de tabaco.

 

Pero la realidad es que la demanda se mantiene en el entorno del 25%, cuando en 2017 era del 26%. Es decir, existe una prevalencia clara en el porcentaje de fumadores y, sin embargo, las ventas han caído en sus establecimientos locales porque sus ciudadanos compran fuera el producto. Cuando no procede, directamente, de fábricas ilegales de tabaco. Es decir, se incrementa el tabaco de contrabando.

El porcentaje de falsificaciones respecto al consumo no doméstico se ha reducido ampliamente. Este año han bajado de 15 a 11 las fábricas ilegales en España, aunque Andalucía se lleva la peor parte, con 9 de esas 11 fábricas clausuradas en el primer semestre de 2024.

IX Congreso frente al contrabando

La tabaquera Altadis-Imperial Brands ha presentado los datos de la Encuesta de Paquetes Vacíos, en la que realiza un exhaustivo análisis de los puntos de procedencia del tabaco ilícito en España donde se aprecia, como primera conclusión, una reducción importante del consumo de este tipo de tabaco en España.

Hoy, además, celebra el IX Congreso frente al contrabando, donde tiene especial relevancia el acuerdo con Gibraltar, que se viene cumpliendo desde hace 6 años y que hace que, como mucho, haya una diferencia del 32% del precio entre lo que se vende allí y lo que se vende en España. De hecho, los datos aseguran que ese acuerdo está funcionando, puesto que Gibraltar ha pasado de ser origen del 67% del tabaco ilícito que se consumía en España en el primer semestre de 2021 al 7,6% del actual.

En todo caso, la normativa comunitaria obliga desde mayo a elaborar un track and trace, es decir, a trazar dónde se fabrica y dónde se vende el tabaco, por lo que sigue sorprendiendo el elevado volumen que llega desde Gibraltar, ya que no fabrica. Se entiende desde Andorra o Canarias, pero no desde Gibraltar.

El informe refleja que el consumo de tabaco ilícito en España ha aumentado ligeramente hasta situarse en el 5,2% en el primer semestre del año.  En concreto, esta cifra supondría una pérdida de recaudación estimada, vía impuestos, de alrededor de 212 millones de euros para las arcas públicas.

Desde Altadis-Imperial Brands, Rocío Ingelmo, directora de Asuntos Legales, nos asegura que la mayoría del volumen de este tabaco ilegal tiene un origen indeterminado, ya que no puede identificarse por los precintos. «Desde la introducción en Europa de la trazabilidad para nuestros productos», afirma, «todo el tabaco que se produce en fábricas de la UE va trazado y, en consecuencia, debería ser sencillo conocer el mercado de destino del mismo».

«Vemos que se ha producido un ligero incremento, pero la evolución no tiene nada que ver a dónde estábamos hace diez años, ya que el comercio ilícito de cigarrillos se ha reducido en más de la mitad», explica Rocío.

Por regiones, Andalucía se mantiene como la comunidad autónoma donde el porcentaje sigue creciendo, seguido de Madrid, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Navarra o La Rioja.

Desde Altadis también han mencionado la posibilidad de que Bruselas termine acordando la subida del impuesto especial al tabaco de manera general entre los socios comunitarios, y se remiten al ejemplo francés de nuevo: «Una política fiscal agresiva y tener un empaquetado genérico no hace que baje de forma significativa el fumar, lo que ocurre es que la gente que puede adquirir el producto más barato en otro lugar lo hace. Cuando no acaba en un mercado ilegal», ha explicado.