Economía
Banco Sabadell

Oliú se harta de TSB y moverá su cuaderno de venta en cuanto se clarifique el Brexit

Josep Oliu se ha hartado de TSB, cuya migración tecnológica ha supuesto unos costes extraordinarios de 460 millones de euros, a los que hay que añadir el saneamiento inmobiliario.

Aunque Banco Sabadell ya ha tirado la toalla, no lo ha hecho a corto plazo: el objetivo del banco con sede en Alicante pasa porque su filial británica genere valor para el grupo de modo que en un par de años pueda entrar en un proceso de consolidación que, según fuentes conocedoras, pasaría por su venta o por su fusión con otro banco.

Fuentes financieras reconocen que Sabadell necesita liberar capital y, teniendo en cuenta que se encuentra bajo la presión continua del BCE para acometer operaciones -más allá de las ventas de carteras de fondos-, lo cierto es que la venta de TSB sería una oportunidad para reforzar el banco.

El principal problema para la operación es el alto precio que se pagó por el banco británico, más de 2.300 millones de euros. «Recuperar esa inversión a día de hoy es imposible, entre otras cosas, porque con las incertidumbres que ha generado el ‘Brexit’ como telón de fondo el mercado no está dispuesto a pagar esas cifras; y más teniendo en cuenta los problemas de los últimos tiempos», explican las mismas fuentes.

Lo que está claro es que a medio plazo la operación se hará. «Lo lógico es que TSB acabe fusionándose con algún banco con intereses en Reino Unido o en manos de algún inversor internacional», señalan desde el sector.

El propio Oliu reconoció recientemente que “la finalización de la migración tecnológica del banco británico se ha completado con unos costes extraordinarios superiores a los previstos”. Unos costes que «sin duda» han «marcado el ejercicio”.

El Sabadell descarta oficialmente la venta de la entidad, toda vez que a día de hoy no tendría mucho sentido vista la gran inversión realizada, además de los costes extraordinarios que ha supuesto. De este modo, el objetivo pasa porque al menos consigan generar algo de valor para la entidad para, eso sí, deshacerse de ella en un plazo máximo de tres años.

Resultados

Los contratiempos de la migración tecnológica de TSB y el impacto de los saneamientos hicieron que Sabadell ganara en 2018 328,1 millones de euros, un 54,2% menos que un año antes. Sin esos atípicos, el beneficio del banco habría aumentado un 9,2%.

Banco Sabadell ganó 328,1 millones de euros en 2018, un 54,2 % menos que en 2017, condicionado por los problemas de la migración tecnológica de su filial británica TSB y al haber asumido también costes extraordinarios para culminar la limpieza de su balance.

En una comunicación a la CNMV, el banco que preside Josep Oliu ha precisado este viernes que ambos factores supusieron impactos extraordinarios por valor de 637,1 millones de euros.

Sin estos atípicos, el beneficio neto del grupo habría crecido un 9,6% en 2018, hasta alcanzar los 783,3 millones de euros, sostiene el banco catalán, que aclara también que, dejando al margen a TSB, el Sabadell habría ganado 568 millones de euros en 2018.