Economía

Las monedas que podrías tener en casa que valen millones

Mucho se ha escrito últimamente –con gran número de errores, por cierto- sobre el valor que tienen algunas de las monedas que tenemos por casa. Sin embargo, OKDIARIO ha hablado con nuestro experto numismático de cabecera, Rubén Pulido, CEO de Pulifil, que nos ha elaborado un informe sobre las monedas más caras del mundo.

“Mucho se ha hablado en estos últimos meses acerca de cuáles eran las pesetas más valiosas, si las tenemos o no las tenemos en casa, si las que tenemos son las que valen o no valen, noticias que, francamente, en su mayoría han sido tratadas desde el más puro sensacionalismo sin pararse a pensar en consecuencias”, explica Pulido, que cree que, con ello, se crean unas falsas expectativas para aquella persona que cree estar delante de un tesoro y y termina llevándose luego una desilusión. Y es que este tipo de informaciones sin rigor también puede tener consecuencias para “aquellos profesionales del sector que en ocasión hemos sido puestos en entredicho al transmitir la realidad de estos bulos”.

Hay algo que sin duda hay que tener en cuenta, y es que el valor de una moneda no se lo da la antigüedad ni el valor nominal, en casi un 100% de los casos el valor de una moneda viene determinado por su rareza; de ahí que en la mayoría de los casos sea “casi imposible” que tengamos en casa algunas de las monedas que los medios han ido mencionando, ya que “son piezas raras, emisiones limitadas que puede que tengamos en casa al igual que puede que mañana nos toque la lotería”, señalan desde Pulifil.

Sin embargo, lo cierto es que, por muy remota que sea, esa probabilidad “existe” y, de hecho, “algún caso esporádico se ha registrado”, recuerda Rubén Pulido, que advierte de que no solo algunas de nuestras pesetas son las que pueden darnos una alegría, ya que a lo largo de todo el mundo existen piezas que son realmente valiosas.

El dólar de los 10 millones de dólares

El 30 de septiembre de 2015, hace prácticamente un par de años, la conocida casa de subastas californiana Stack’s Bowers sacaba a subasta una mítica pieza de un dólar del año 1794. La moneda en si tiene un diámetro de cuatro centímetros y, si se fundiera y se vendiera como plata, no se vendería por más de diez euros en estos momentos. Pero el «Amon Carter», como se la llama en homenaje a la persona que la tuvo durante años, es una rompedora de récords: fue comprada por 10.016.875 dólares, el valor más alto jamás otorgado a una moneda.

El «Amon Carter».

20 Dólares de oro de 1933

Las monedas de 20 dólares de oro son también piezas míticas,  en la actualidad se siguen acuñando y muchos inversores refugian sus ahorros en este tipo de emisiones, es una pieza muy comercial y que cada año es comercializada por todo el mundo, ¿pero que ocurrió en 1933?

Esta pieza, conocida como «double eagle» (valía el doble de la «eagle» de 10 dólares), se acuñó en 1933 como una de las últimas en oro que nunca llegaron a estar en circulación. En abril de ese año Franklin D. Roosevelt suprimió el patrón oro para evitar el pánico de los bancos y el acaparamiento de monedas en medio de la Gran Depresión. El Tesoro mandó fundir todas las monedas menos dos, que se quedaron el museo Smithsonian y no se consideraban monedas de curso legal. Las demás «double eagle» (cerca de medio millón) tenían que haber sido destruidas, pero se sospecha que un empleado de la Casa de la Moneda se quedó con diez.

En el año 2002 salió a la luz una de estas piezas, al parecer proveniente del tesoro de los EEUU, se subasto en verano de ese mismo año en la prestigiosa casa de subastas Sotheby’s y alcanzo un precio de 7,6 millones de dólares, algo mas de 5 millones y medio de euros.

«Double eagle».

Mas adelante, en julio del año 2011 las autoridades de EEUU confiscaron a una ciudadana de Filadelfia varias unidades de esta valiosa moneda. Según indicó a los agentes, la propietaria había obtenido estas piezas por herencia tras abrir una caja de seguridad de su difunto padre; pero nunca mas se ha sabido acerca de este suceso.

1.000 Rublos de 1740

Tal y como citaban los gerentes de la casa de subastas suiza Sincona, esta moneda es la moneda de plata más valiosa de Rusia, junto con el famoso rublo de Constantin. Una pieza de una extrema rareza que provenía de una colección privada. Fue subastada el 10 de septiembre del año 2012, comenzó en un precio de salida de 250.000 francos suizos y termino llegando a los más de 3 millones y medio de francos, unos 3.200.000 euros al cambio. Desde aquel momento ha sido la moneda mas cara vendida en Europa.

Rublos de 1740.

Monedas españolas

A decir verdad las mayoría de las monedas más valiosas del mundo siempre han sido adjudicadas en EEUU, la moneda norteamericana siempre ha tenido una extrema rareza y no es tarea complicada encontrar piezas que sumen los millones de dólares al otro lado del Atlántico, si bien es cierto que también existen varios ejemplares de la época romana que registran grandes valores en algunas casas de subastas pero, como hemos podido ver en los ejemplos anteriores, el valor no va reñido a la antigüedad.

Pero y las monedas españolas, ¿no son valiosas? Según Rubén Pulido, sí; de hecho no hace muchos años en España se registro un nuevo récord totalmente histórico registrado en una famosa casa de subastas barcelonesa, Aureo & Calico en el año 2008 realizó una millonaria subasta denominada Caballero de Yndias, subasta que sin lugar a dudas les catapulto a nivel internacional y donde se llego a pagar 800.000 euros por un centén segoviano de 1609. De esta inédita moneda solamente se fabricaron siete piezas ,está considerada la moneda de oro más grande de la historia acuñada en toda Europa y una de las más cara del mundo en la actualidad. Se cree que debido al exagerado valor de la moneda en su época , solamente se utilizaba como símbolo de reconocimiento o premio para algunos personajes destacados del momento.

Centén segoviano.

Por último en este grupo de monedas no podemos dejar pasar a la peseta pues aunque no fue mencionada en ninguno de los artículos difundidos por los medios hace unos meses, en España tenemos la fortuna de contar con la peseta más cara del mundo, es decir, dentro de la divisas internacionales con denominación unitaria nos encontramos ante el ejemplar mas raro de todo el panorama internacional.

Tras el triunfo bélico del 1 de abril de 1939, el Gobierno de Franco usó la moneda antigua, hasta que en 1944 acuñó el primer ejemplar de una peseta, mas adelante, y basado en el busto que Mariano Benlliure había creado del general se emitió una pieza de con la efigie del caudillo, concretamente en el año 1946.

La pieza fue presentada a Franco, que la rechazó porque no le gustaba la caída del cuello, sin embargo por error ya se encontraban algunos de estos ejemplares en circulación, los responsables trataron de “secuestrar” estas piezas para su posterior fundición pero lamentablemente no pudieron recuperar todas las unidades, puede que quedaran unos centenares en circulación. Una rareza que a día de hoy sigue apareciendo en esporádicas ocasiones entre las pesetas que guardamos en casa.

En el año 2011, la casa de subastas catalana Marti Hervera, subasto uno de estos ejemplares con unas condiciones de conservación bastante buenas, tuvo un precio de salida de 5.000 euros y llego a rematarse en los 7.400 euros. Mas de un millón de pesetas por una sola peseta, ahí es nada.

Primer ejemplar de una peseta.

Por último añadir que al igual que es de una gran rareza, también es una de las piezas españolas mas falsificadas, es recomendable siempre contar con la opinión de expertos altamente cualificados y que posean una solida trayectoria en este sector, de esta forma nos aseguraremos siempre saber ante las piezas que nos encontramos.