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Funcas rompe con el optimismo por la inflación y sube tres décimas sus previsiones para 2025

La fundación prevé que la inflación interanual se sitúe en el 2,2% en 2025, por encima de la estabilidad

  • Benjamín Santamaría
  • Economista, analista, conferenciante y máster de educación. Redactor de economía en OKDIARIO y autor de "La economía a través del tiempo" en el Instituto Juan de Mariana

La Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) ha roto este miércoles con el optimismo que mantienen diversas instituciones y el Gobierno de Sánchez con la inflación y ha subido tres décimas sus previsiones de cara a este 2025, hasta el 2,2%, por encima del nivel de estabilidad de precios. La organización ha tomado esta decisión tras conocer los datos definitivos del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la inflación de diciembre.

En concreto, Funcas preveía, hasta ahora, que la tasa media anual de la inflación de 2025 fuera del 2%. «El Consejo de Gobierno del BCE (Banco Central Europeo) considera que la mejor forma de mantener la estabilidad de precios en la eurozona es teniendo un objetivo de inflación del 2% a medio plazo», explica el Banco de España. Por tanto, la organización preveía un estadio de equilibrio en los precios.

Sin embargo, el aumento de dos décimas del pronóstico del Índice de Precios de Consumo (IPC) en España sitúa a la economía en un rango de inestabilidad y por encima de los objetivos de las autoridades monetarias, que se encuentran en pleno proceso de rebajas de tipos de interés.

El centro de estudios económicos ha indicado que esperan que la tasa de inflación subyacente en 2025 suba una décima, hasta el 2,3% para el conjunto del año, manteniéndose por encima del 2% todo el ejercicio. Este incremento de las previsiones realizado por Funcas se debe a la subida del precio del petróleo y un resultado en diciembre del IPC superior a lo previsto.

Previsión de Funcas sobre la inflación

Así, el IPC subió un 0,5% en diciembre, más que en el mismo mes de 2023, lo que ha elevado la tasa de inflación en cuatro décimas, hasta el 2,8%. La subyacente aumentó dos décimas, hasta el 2,6%.

El alza de la inflación no fue solo resultado de la volatilidad en los productos energéticos, sino que también contribuyó la persistencia de presiones subyacentes, especialmente en los servicios.

Una persona comprando alimentos en una tienda.

No obstante, desde Funcas indican que la tasa de inflación en los alimentos elaborados, la más baja desde octubre de 2021, prácticamente se ha normalizado y también la de los bienes industriales no energéticos.

El centro de estudios económico ha expresado su preocupación por la evolución de los servicios, con un repunte de su tasa hasta el 3,5%. «Esta evolución, y el diferencial respecto a los bienes industriales no energéticos, indica que persisten tensiones inflacionistas estructurales, que se dirigen sobre todo hacia ese sector, donde hay más margen para subir precios», avisan.

Respecto a los productos energéticos, desde Funcas señalan que elevaron su inflación en casi tres puntos porcentuales, debido al encarecimiento tanto de la electricidad como del gas y los combustibles, unido a un efecto escalón derivado de la bajada registrada el mismo mes del pasado año.