Economía
Informe Comisión Europea

España figura entre los siete únicos países europeos en los que el año pasado bajaron los salarios

Los sueldos reales bajaron en 2017 por la subida de la inflación

Los asalariados españoles se han recuperado peor de la crisis que los de otros países europeos. España figura en el grupo de siete países de la Unión Europea (UE) en el que cayeron los salarios reales en 2017, según se desprende de un informe publicado este jueves por la Comisión Europea que explica que este comportamiento se debe a la «baja pero positiva» evolución de la inflación y el «estancamiento» de los salarios nominales.

El estudio del Ejecutivo comunitario resalta, sin embargo, que los salarios reales aumentaron en la mayoría de los Estados miembros a lo largo del año pasado, aunque apoyaron menos que otros años el poder adquisitivo de los trabajadores. «El incremento en los salarios reales de consumo (los salarios ajustados de acuerdo al cambio de los precios al consumo) ayudó a mantener la demanda agregada», subraya el documento.

Pero al mismo tiempo, debido este repunte de los precios, el crecimiento de los salarios reales fue menor al registrado en 2016 en la mayoría de los socios comunitarios «e incluso se contrajo» en siete países, que son Austria, Croacia, Italia, Finlandia, Grecia, Países Bajos y España.

Bruselas afirma que la explicación de este comportamiento se debe a la combinación entre un crecimiento «bajo pero positivo» de la inflación y un «estancamiento» (caída el caso de Finlandia) de los salarios nominales.

En efecto, el estudio señala que el crecimiento de los salarios nominales fue positivo en casi todos los socios del bloque comunitario tanto en 2017 como en la primera mitad de 2018, pero únicamente registraron un incremento sólido los países bálticos, Rumanía y Bulgaria (por encima del 7%).

«Por el contrario, el crecimiento de los salarios fue moderado en el resto de la UE», apunta el informe de la Comisión Europea, para después añadir que se mantuvo por debajo del 1% en Grecia y Portugal que registraron en el pasado déficit por cuenta corriente y «necesidades generalizadas de ajuste».

También se han observado crecimientos moderados en Finlandia e Italia, pero en estos dos casos Bruselas lo achaca al deterioro de su posición externa y a la pérdida de competitividad tras la crisis. Alemania y Francia, las dos economías más grandes de la UE, registraron incrementos de la compensación nominal por empleado del 2,6% y 1,8%, respectivamente, mientras que en España la evolución fue prácticamente plana.

El estudio del Ejecutivo comunitario afirma que este crecimiento «relativamente bajo» de los salarios nominales en el bloque comunitario tiene su origen tanto en la baja inflación como en el «modesto» aumento de la productividad, además del desempleo y su evolución.