Economía
Hito económico en los países del Golfo

La aplicación del IVA en Arabia Saudí y Emiratos cumple una semana

Se cumple una semana de un hito económico en la historia de Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos (EUA), desde el pasado 1 de enero los productos y servicios tienen IVA. Se trata de la primera vez que estas petromonarquías instauran este impuesto y lo han hecho para compensar la caída de los ingresos procedentes de la industria petrolera.

El Estado del bienestar del petróleo en Arabia Saudí ya no existe. La caída del precio del crudo y las inquietudes de las nuevas generaciones han obligado al reino a abrirse al mundo y permitir a sus súbditos que se diviertan para estimular el consumo interno. Y no sólo eso, además, permitirá a la mujer incorporarse al mercado laboral y sacará a Bolsa en 2018 un 5% de su petrolera estatal Aramco.

La introducción de este impuesto se fijó en 2015 con el Acuerdo Unificado para el Impuesto sobre el Valor Añadido. La gasolina, el tabaco, los alimentos, los seguros, los hoteles o los servicios de telecomunicaciones han estado gravados con el 5%, un hecho que no ha sido del gusto de los comerciantes porque creen que la medida hará caer el consumo.

Ahora, al imponer los gravámenes a los productos y servicios básicos de los súbditos de Emiratos y Arabia Saudí, el coste de vida se ha elevado e incluso las monarquías se han visto obligadas a instaurar (también por primera vez) unos subsidios mensuales de alrededor de 300 dólares (1.000 riyales) para las familias de bajos ingresos para paliar la subida del precio de la energía y la aplicación de este nuevo impuesto.

Los países del Golfo Pérsico esperan una recaudación de 3.300 millones de dólares a través del IVA para brindar, según los planes de estos países, servicios públicos de calidad, así como dejar de depender del petróleo.

Han quedado fuera de los gravámenes los alquileres, las tarifas escolares, los servicios financieros, algunos tratamientos médicos y el transporte público. De momento, los gobiernos de los citados países han descartado un aumento de los salarios para hacer frente a la subida de los precios.

Otros países, como Baréin, Imán, Catar y Kuwait, se han comprometido a seguir la estela de Emiratos y Arabia Saudí, aunque lo harán con la llegada de 2019.