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Luis Suárez derrumba la muralla china y mete al Barça en la final del Mundialito

El Barcelona cumplió el trámite ante el Guangzhou en las semifinales del Mundialito de Clubes y se verá las caras con River Plate el próximo domingo con el título en juego.

Tuvieron que pasar 38 minutos para que el Barcelona abriese el marcador. Luis Suárez, en colaboración con el portero chino Li, envió el balón a la red después de un disparo desde la frontal de Rakitic que el meta despejó inocentemente al centro. El uruguayo no perdona esas oportunidades.

Sí lo había hecho antes Munir, sustituto de Messi. Hasta en dos ocasiones se quedó el canterano con la miel en los labios. El argentino fue baja de última hora debido a un cólico nefrítico que le impidió estar disponible. «Leo no está bien. Todos ya sabemos lo doloroso que es. Vamos a ver como pasa la noche, la evolución de los síntomas y ya veremos como se encuentra y si está en condiciones para jugar el próximo partido», explicó Roberto Fernández, director deportivo del Barça.

La mejor ocasión del Guangzhou estuvo en la cabeza del brasileño Elkeson antes del descanso. Sin embargo, Bravo, por el que se decantó Luis Enrique en la portería, firmó un paradón para evitar el empate. Con una gran estirada, que mezcló reflejos y explosividad de piernas, detuvo el balón.

También la primera parte dejó la terrorífica lesión del lateral izquierdo Zou Zheng. El defensa recibió un pequeño empujón por detrás de Alves y al caer se dobló la pierna por completo. Escalofriante imagen la del chino tumbado en el césped con el pie del revés. El futbolista fue retirado en camilla con el dolor reflejado en su semblante.

Zou sufrió una grave lesión (AFP)

Los chinos, actuales campeones de la Champions de Asia y que no perdían desde mayo, se fueron a la caseta con la confianza de saber que habían realizado un primer tiempo más que decente y que de seguir así podían tener alguna opción de igualar el encuentro. Pero todas sus ilusiones se derrumbaron nada más comenzar la segunda parte.

Otra vez Suárez, no podía ser otro, era el que firmaba el segundo tanto. Se asoció a la perfección con Iniesta, que estrenaba look con cresta, para finiquitar el partido y sellar el billete al partido contra River.

El hat-trick que redondeó el marcador llegó de penalti. Un piscinazo de Munir en el área china llevó al uruguayo a los once metros para batir de nuevo a Li

El domingo, en el estadio Internacional de Yokohama, Barcelona y River Plate ya están citados a las 11:30 de la mañana en España. El campeón se proclamará mejor club del mundo del año 2015.