Estos son los alimentos que no debes llevar a la playa: pueden intoxicarte

• Janire Manzanas
• Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.
• • 06/08/2024 18:00
  • Actualizado: 06/08/2024 18:00

Durante el verano, el riesgo de intoxicación aumenta debido a las altas temperaturas que favorecen el crecimiento de microorganismos. Las intoxicaciones alimentarias son enfermedades provocadas por la ingesta de alimentos contaminados con gérmenes patógenos, toxinas, virus o parásitos. Estas infecciones pueden ser causadas por bacterias como Salmonella y E. coli, virus como el de la hepatitis A, o parásitos como los que causan la triquinelosis y anisakiasis. Aunque los controles de producción y las inspecciones son eficaces en prevenir estos problemas, los consumidores también juegan un papel crucial al mantener buenas prácticas de higiene y seguir las recomendaciones de almacenamiento y conservación de los alimentos. La contaminación microbiana no siempre se refleja en la apariencia del alimento, por lo que es esencial seguir normas estrictas de manipulación y conservación.

Para minimizar estos riesgos, es fundamental seguir las «Reglas de Oro» para la preparación higiénica de los alimentos, como asegurarse de que los alimentos sean manipulados y cocinados correctamente, y conservarlos a las temperaturas adecuadas. Es importante cocinar los alimentos a temperaturas seguras, mantenerlos refrigerados si no se van a consumir de inmediato, y evitar el contacto entre alimentos crudos y cocinados. Además, se debe asegurar una buena higiene personal y en las superficies de cocina, mantener los alimentos fuera del alcance de insectos y animales, y usar siempre agua potable. No consumir alimentos perecederos expuestos a temperatura ambiente y exigir condiciones sanitarias adecuadas en establecimientos de comida también es esencial.

No lleves estos alimentos a la playa

A la hora de disfrutar de un día de playa en verano, la preparación adecuada de los alimentos es esencial para evitar que el calor y la exposición al sol los estropeen. Lo primero y más importante es utilizar bolsas isotermas o neveras portátiles con acumuladores de frío para mantener los alimentos a una temperatura segura. En cuanto a los alimentos, hay que consumirlos rápido una vez fuera de la nevera, y no deben permanecer a temperatura ambiente más de dos horas, o una hora si hace mucho calor.

En cuanto a los tipos de alimentos, los expertos recomiendan evitar llevar productos que se puedan deteriorar rápidamente. Los huevos crudos o pasados por agua no son recomendables. Si se utilizan huevos en la elaboración de comidas, como por ejemplo una tortilla de patatas, estos deben estar bien cocinados.

Además, la mayonesa debe estar refrigerada en todo momento y es preferible no mezclarla con la ensaladilla hasta el momento del consumo. Los productos lácteos también requieren especial atención: deben ser pasteurizados y no estar expuestos al sol. Los yogures bebibles son una buena opción para mayores y pequeños, ya que se conservan bien en la nevera portátil.

El pescado y el marisco también hay que cocinarlos bien y dejar que se enfríen antes de llevarlos a la playa. Los filetes empanados conviene cocinarlos a una temperatura interna mínima de 75ºC y mantenerlos fríos hasta el momento de su consumo para prevenir la proliferación de bacterias.

En días calurosos, es preferible llevar platos fríos como ensaladas de pasta, garbanzos, así como bocadillos de conservas de pescado en pan integral, sin salsas que puedan deteriorarse rápidamente. Los alimentos menos seguros incluyen productos lácteos, quesos blandos, pescados y mariscos crudos, carnes frías, embutidos y preparaciones con huevo crudo.

Para los snacks, la fruta fresca como manzanas, peras y uvas, junto con verduras como zanahorias y tomates, son opciones que no requieren refrigeración y se conservan bien. Los frutos secos, galletas integrales y barritas de cereales son ideales para picar entre horas. También es crucial llevar suficiente agua y bebidas, incluyendo zumos de frutas y bebidas isotónicas, para mantenerse bien hidratado.

¿Cómo comer seguro en verano?

Durante el verano, algunos alimentos presentan riesgos elevados de intoxicación alimentaria debido a las altas temperaturas. En particular, es recomendable evitar ciertos productos para prevenir problemas de salud.

En primer lugar, conviene evitar la mayonesa casera porque está hecha con huevo crudo, lo que puede provocar salmonelosis si no se conserva adecuadamente. A diferencia de la mayonesa industrial, que utiliza huevo pasteurizado, la casera hay que consumirla en menos de 48 horas y tenerla refrigerada en todo momento.

También hay que tener cuidado con la fruta cortada, que puede contaminarse durante su preparación y propagarse rápidamente si no se mantiene refrigerada. Es mejor evitar fruta que haya estado fuera de la nevera por más de dos horas. El pescado crudo, como sushi o sashimi, presenta riesgos similares.

Finalmente, es aconsejable consumir con moderación alcohol y bebidas azucaradas, ya que pueden causar deshidratación, especialmente en días calurosos. Las bebidas alcohólicas reducen la capacidad del cuerpo para retener líquidos, lo que aumenta el riesgo de deshidratación.

Para minimizar los riesgos, es fundamental seguir prácticas básicas de seguridad alimentaria como lavar bien las manos y los alimentos, cocinar a las temperaturas adecuadas y mantener los productos refrigerados.