Ciencia

El extraño bulto en la atmósfera de Venus

El bulto encontrado en la atmósfera de Venus mide la nada despreciable cantidad de 10.000 kilómetros. Pese a que este planeta se considera como el gemelo de la Tierra, cada vez descubrimos más ejemplos que nos separan de él.

Venus se ubica en la zona habitable de nuestro Sistema Solar, tiene un tamaño muy similar al de la Tierra y una densa atmósfera. Sin embargo, mientras que nuestro mundo se transformó en un maravilloso vergel lleno de vida, aquella roca se convertía en un verdadero infierno con las temperaturas más elevadas del Sistema Solar, tormentas eléctricas tremendas y una atmósfera venenosa que acaba con todo rastro de vida.

Ahora, una de las últimas novedades descubiertas es una extraña protuberancia fluctuante que se observa en su atmósfera. Sin embargo, ya se ha encontrado qué motiva estos 10.000 kilómetros de bulto en la zona superior del venenoso mundo.

Al parecer, las gigantescas cordilleras venusianas serían las culpables de este fenómeno, ya que son capaces de crear una especie de ola de gravedad masiva.

Una extraña estructura con la forma de un arco de 10.000 de kilómetros de anchura que fluctúa en la atmósfera superior de Venus es una de las principales diferencias con la terrestre.

Descubierta por primera vez en 2015, puede pasar unos días totalmente quieta sobre las turbulencias venusianas, pero es realmente curiosa y misteriosa hasta hoy.

Las singularidades de la atmósfera de Venus y del propio planeta

Está claro que Venus es diferente. Orbita el Sol en rotación retrógrada, al igual que Urano, es decir, al contrario que el resto de planetas del Sistema Solar, y lo hace muy lento, tardando unos 225 días terrestres, mucho contando su cercanía al astro rey.

Además, sus días duran 243 días terrestres, es decir, una barbaridad, pues cada día es más largo que cada año. A eso hay que sumarle que su atmósfera sí que gira a gran velocidad sobre el planeta, 60 veces más veloz, completando una vuelta cada 4 días, lo que provoca vientos de 400 kilómetros por hora.

Esta superrotación provoca la inexistencia de ondas gravitatorias estacionarias, como es el abultamiento masivo de la atmósfera. Algo que ha quedado confirmado tras simular por ordenador el planeta y sus movimientos.

De momento, es mucho lo que no sabemos de nuestro venenoso vecino. Según los científicos, estudiando mejor el planeta y sus extensos días, podríamos descubrir mucho de sus numerosas peculiaridades. Solo así seremos capaces de explorar mejor qué sucede dentro de este misterioso mundo y cómo es posible que sean tan diferente a nuestra Tierra.