Ciencia
Alerta climática

Duro aviso de los científicos: el nivel del Mar Mediterráneo sube el triple de rápido de lo que pensaban

Las investigaciones recientes sobre el nivel del mar Mediterráneo han revelado un panorama más alarmante de lo esperado. Según el informe elaborado por el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología Italiano (INGV), el nivel del mar está aumentando hasta tres veces más rápido en algunas áreas del Mediterráneo.

Esta aceleración no se debe únicamente al aumento global del nivel del mar por el cambio climático, sino también a un proceso de subsidencia o hundimiento gradual de las zonas costeras, fenómeno que los estudios previos habían infravalorado.

Un aviso duro: la creciente amenaza del nivel del mar Mediterráneo

Cómo se mencionó arriba, este movimiento descendente del terreno, impulsado por causas naturales y por actividades humanas, agrava el impacto del ascenso del mar.

La colaboración entre el INGV y la Universidad de Radboud permitió así actualizar las proyecciones, confirmando que las costas mediterráneas corren un riesgo significativo de aquí a finales de siglo.

En la misma línea, el estudio detalla que la subsidencia de la tierra juega un papel clave en la aceleración de la subida del nivel del mar. Marco Anzidei, investigador del INGV, explica que este fenómeno de hundimiento es impulsado tanto por factores naturales como por actividades humanas.

A lo largo del litoral mediterráneo, donde ya existe una elevada exposición a los efectos del calentamiento global, esta subsidencia representa un problema mayor.

Proyecciones no tan alentadoras: un mar Mediterráneo en riesgo de inundación

La colaboración entre las dos instituciones científicas permitió desde entonces ajustar las proyecciones del IPCC hasta el año 2150, con la inclusión de datos relativos al hundimiento.

Se han analizado en total 265 puntos del Mediterráneo, cubriendo estaciones mareográficas de redes internacionales de vigilancia, incluidos lugares en las costas de Cataluña, Comunitat Valenciana, Murcia, Almería y Andalucía, así como las Islas Baleares.

Los resultados recalculados revelan diferencias significativas con las estimaciones previas. Mientras el IPCC proyectaba un aumento del nivel del mar, el informe del INGV señala que en ciertas áreas del Mediterráneo las cifras podrían alcanzar hasta 109 centímetros por encima de lo previsto en los cálculos originales.

Esta disparidad indica que los niveles actuales de exposición son mayores y, como resultado, se espera que cerca de 38.500 kilómetros cuadrados de las costas mediterráneas sufran el impacto de estas variaciones.

Regiones más vulnerables en el Mediterráneo

El estudio identifica algunas de las áreas con mayor riesgo de inundación y erosión costera. Entre ellas, las costas de Italia, Grecia, España y Francia, que enfrentan una acelerada tasa de hundimiento del terreno.

El informe también estima que las costas del norte del Mediterráneo, con aproximadamente 19.000 kilómetros cuadrados, serán las más afectadas.

Impacto en las actividades humanas e infraestructuras

Consecuencias para las poblaciones costeras y futuras recomendaciones

El incremento del nivel del mar Mediterráneo representa un desafío importante no sólo para los ecosistemas marinos, sino también para las poblaciones y actividades humanas en la región. El informe subraya la importancia de tomar medidas preventivas que minimicen el impacto.

Ante la expectativa de que la subida del nivel del mar continúe hasta el próximo siglo, las infraestructuras costeras y las poblaciones están en una posición vulnerable que requerirá soluciones a largo plazo.

A su vez, cabe recordar que el mar Mediterráneo, uno de los mares más rápidos en calentarse, registró aumentos de temperatura media del agua que duplican la velocidad de calentamiento de los océanos.

Estos cambios, junto con la creciente acidez del agua, ponen en peligro diversas especies, especialmente aquellas que forman parte de los ecosistemas de coral y moluscos, esenciales para el equilibrio marino.

Recomendaciones clave

Según las conclusiones de los expertos, «tomar medidas concretas es fundamental para proteger las poblaciones costeras y sus medios de vida».

De no llevarse a cabo intervenciones efectivas, las áreas más vulnerables del Mediterráneo podrían enfrentar riesgos significativos para finales de este siglo.