Comida del bebé en vacaciones: ¿cómo organizarse?

Llegan las vacaciones para muchas personas, y aunque durante los meses previos y debido a la pandemia, ya hemos estado más tiempo en casa, seguro que tenemos que volver a organizarnos en lo que respecta a las comidas. En el caso de tener un bebé y además irnos de vacaciones, nada como preparar todo bien para que la comida del bebé se pueda realizar sin ningún problema.

Comida del bebé en vacaciones: ¿cómo organizarse?

No importa si tu destino vacacional es la playa, un camping o estar en un hotel. Si llevas contigo un bebé, deberás tener en cuenta cosas tan importantes como su equipaje, y tan esenciales como su alimentación.

Será esencial, primero de todo, tener en cuenta la edad del bebé para a  partir de la alimentación que esté tomando poder organizar bien su comida en vacaciones.

Solo leche hasta los 6 meses

Mientras la alimentación del bebé sea exclusivamente la leche materna (o la de fórmula) y, por lo tanto, hasta aproximadamente los 6 meses de edad, no habrá prácticamente problema alguna para organizar la comida del bebé en verano.

Si el bebé es amamantado, la leche materna siempre tiene la composición óptima, y está a la temperatura adecuada, de modo que solo será suficiente ofrecérsela al niño cada vez que lo solicite.

En el caso de usar fórmula infantil, tan solo debes llevártela contigo y mantener las comidas habituales, sin tratar de adaptarlas a tus vacaciones: para mayor comodidad, prefiere mejor la leche líquida preparada en lugar del tipo en polvo, que requiere más equipo y agua previamente hervida. Con la fórmula líquida solo necesitará un bar o restaurante para calentar la botella al baño maría.

La comida para bebés de 6 meses a 1 año

Cuando comenzamos con la fase de destete, por supuesto, la situación se vuelve un poco más complicada, ya que se necesita una preparación que respete reglas higiénicas muy precisas y que necesite espacios donde pueda preparar alimentos para bebés. Por otro lado, los niños solo deben ser llevados a la playa a esta edad temprano en la mañana y al final de la tarde, por lo que se supone que las comidas principales no se comen en la playa, sino en la casa de vacaciones, en el restaurante o en una aldea turística, donde generalmente vamos a poder encontrar todo lo que vamos a necesitar para preparar comida para bebés para sus hijos.

Sin embargo, si no tienes una estructura adecuada, podemos recurrir a productos industriales para facilitar las cosas : para el caldo de verduras hay verduras homogeneizadas, en frascos de vidrio, para diluir con agua, o purés de verduras ya preparados, en bolsas dosis única, simplemente para calentar; para carne o pescado lo ideal es utilizar productos homogeneizados; Para completar la comida, agrega un poco de la harina (arroz, maíz, cereales, sémola), y también un poco de aceite.

Aún más rápido, podemos comprar un potito ya preparado y que se pueden encontrar de carne, verduras o pescado. Solo tenemos que preocuparnos de colocar el potito al baño de agua o en el microondas y luego darlo directamente del potito o pasarlo a un plato. Son productos muy cómodos y seguros desde un punto de vista higiénico, ya que no requieren almacenamiento en el refrigerador. Sin embargo, si no se consume todo el frasco, debe colocarse inmediatamente en el refrigerador y consumirse dentro de las 24 horas; de lo contrario, es necesario tirarlo.

Tampoco es recomendable basar la alimentación del bebé en este tipo de potitos, aunque recurrir a ellos de manera puntual en vacaciones, puede ser una gran solución.

Después de los 12 meses

Después de alcanzar la edad de un año, el niño comienza a cambiar de una dieta de puré a una más similar a la de los adultos, con trozos de comida gradualmente más grandes . Esto no significa que su comida pueda estar compuesta de degustaciones en el plato de mamá y papá, sino que debe estar preparada especialmente para él. 

Comida para bebés en el restaurante

Si estamos en un restaurante, podemos pedir un poco de pasta con simple tomate y aceite crudo agregado, además de una albóndiga especialmente hecha (no las albóndigas fritas o el ragú de adultos), o un lenguado o bacalao cocido preferiblemente al vapor.

Último consejo: será bueno asegurarse que siempre haya algunas verduras en el plato del niño o niña , quizás de color, también al vapor o con otros métodos de cocción simples para acostumbrarle inmediatamente al hábito de consumir verduras en cada comida.

La merienda: yogurt o fruta

En los primeros meses de destete, la merienda preferiblemente consiste en leche materna o leche artificial. Posteriormente puede ser reemplazada por yogurt , que sin embargo debe mantenerse en el refrigerador o en una bolsa más fría hasta su uso, o por una fruta homogeneizada con un poco de galleta granulada o, para niños mayores, fruta fresca para ser guardada en una bolsa térmica.

Aumenta tu consumo de agua

Mientras la alimentación sea exclusivamente lechosa, no hay necesidad de agregar adiciones de otros líquidos; Sin embargo, apenas comienza el destete, en verano más que nunca es necesario suplementar la alimentación del niño con agua .

No tenemos que dar al bebé ni bebidas azucaradas ni infusiones de ningún tipo que, además de calmar menos la sed, es posible que acostumbres al pequeño al sabor dulce, que puede favorecer el sobrepeso en la edad futura.