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Anemia en el embarazo: Riesgos y cómo prevenirla con la dieta

Sufrir de anemia en el embarazo es algo bastante común que se debe controlar aumentando la ingesta de hierro en la dieta.

Sufrir de deficiencia de hierro en el embarazo, es algo más habitual de lo que parece y aunque el remedio más eficaz al respecto será el de aumentar sus dosis a través de la dieta, en el caso de que se detecte anemia en el embarazo debemos estar alerta para evitar cualquier riesgo de salud tanto para la madre como para el bebé. Veamos entonces cuáles son sus síntomas, qué riesgos tiene y cómo prevenirla.

Anemia en el embarazo

La anemia durante el embarazo es un problema de salud mundial debido al transporte insuficiente de oxígeno. Algo que no se debe pasar por alto ya que como decimos, puede ser un factor de riesgo importante tanto para las mujeres embarazadas como para sus bebés.

Entre el 22% y el 56% de las mujeres embarazadas sufren de anemia en el mundo. En la mayoría de los casos, se debe a la falta de hierro , que se puede complementar fácilmente con una dieta adecuadamente equilibrada y para saber si se padece o no, debemos saber que una de las formas más comunes en las que se manifiesta es a través de debilidad y mareos, que a veces sin embargo no se reconocen claramente como síntomas de anemia.

Pero nunca debe ser algo que subestimemos dado que los casos más graves de anemia en el embarazo pueden causar morbilidad y mortalidad tanto para las futuras madres como para sus hijos.

Las causas de la anemia

La Organización Mundial de la Salud define la anemia como una condición en la que el número de glóbulos rojos o su capacidad para transportar oxígeno no es suficiente para satisfacer las necesidades fisiológicas de los diversos tejidos y órganos de un individuo, que varían según la edad, sexo, altitud, tabaquismo y estado de embarazo.

Hay varias formas de anemia , cada una con diferentes desencadenantes . La causa más común de anemia es la deficiencia de hierro (anemia por deficiencia de hierro), pero otros posibles factores son:

Durante el embarazo, alrededor del 95% de las anemias son causadas por deficiencia de hierro . A su vez, esta deficiencia puede deberse a:

Síntomas de la anemia en el embarazo

Los casos más leves de anemia pueden no presentar ningún síntoma . Las condiciones más severas, por otro lado, podrían manifestarse con:

Sin embargo, muchos de los síntomas asociados con la anemia en el embarazo son bastante inespecíficos, ya que también podrían ocurrir en mujeres embarazadas que no tienen insuficiencia de glóbulos rojos.

Por este motivo, una herramienta útil y bastante sencilla para comprobar el estado de la anemia es el hemograma , que mide la cantidad y el tamaño de los glóbulos (incluidos los glóbulos rojos) y que es además un examen de rutina durante el período gestacional. .

Riesgos y consecuencias de la anemia en el embarazo

La anemia durante el embarazo es un factor de riesgo importante de morbilidad tanto para la madre como para el feto .

Los bebés nacidos de madres anémicas pueden presentar:

Por otro lado, el embarazo tiene un mayor riesgo de preeclampsia , desprendimiento de placenta y hemorragia posparto .

Remedios para la anemia en el embarazo

Los remedios recomendados en caso de que se diagnostique anemia en el embarazo, implican la integración de hierro, vitaminas y ácido fólico para revertir la enfermedad. En casos graves, sin embargo, con dificultades respiratorias y debilidad severa, puede ser necesaria una transfusión de sangre o una ingesta de hierro por vía intravenosa , si se trata de una deficiencia de hierro .

Dieta recomendada para prevenir la anemia en el embarazo

En la mayoría de los casos, la anemia se puede prevenir durante el embarazo, especialmente con una dieta equilibrada que sea adecuada a las necesidades nutricionales de la madre y el feto . Es posible integrar correctamente el hierro y todos los micronutrientes al incluir estos alimentos en la dieta :

Además, dado que la absorción del hierro aumenta en un ambiente gástrico más ácido , para incrementar su disponibilidad en el organismo es recomendable combinar el consumo de alimentos ricos en él (como carnes o verduras) con vitamina C, por ejemplo aliñándolos con jugo de limón .

También será bueno el uso de hierbas aromáticas , que además de dar sabor a los alimentos estimulan las secreciones ácidas del estómago, algo que puede ser útil para este propósito.