El Govern insiste en su cruzada contra el monumento al Crucero Baleares tras perder todas las sentencias

El  pacto de izquierdas que gobierna en Baleares prosigue su cruzada contra la permanencia del monumento al Crucero Baleares, instalado en la plaza de Sa Feixina de Palma tras perder todas las sentencias presentadas para derribar el monumento. Lo hace olvidando una vez más que el monolito fue adaptado a la Ley de Memoria Histórica y es ahora un monumento a todas las víctimas de la guerra sin distinción de bandos.

Representantes del Govern han dicho hoy en Guadelfo (Granada) que es una «vergüenza» la asociación del crucero Baleares con las Islas. Según ha informado Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, el secretario autonómico de Memoria Democrática, Jesús Jurado (Podemos),  y el director general de Memoria Democrática, Marc Herrera, han asistido este domingo a la sexta marcha integral organizada por la Asociación Sociocultural La Desbandá, que se ha llevado a cabo en la desembocadura del río Guadalfeo (Granada).

Jesús Jurado ha indicado durante el acto que «es muy importante estar hoy aquí como representantes del Govern, tanto para poner de relieve que existen lugares de España en los que la memoria democrática se toma en serio, enmarcándola en el ámbito de los derechos humanos y el derecho de las víctimas, como para poder explicar la vergüenza colectiva que supone, como sociedad balear, quedar asociados a la barbarie fascista que cometió las atrocidades en la carretera de Málaga en 1937, a través de las acciones criminales del crucero Baleares», informa Europa Press.

Jurado, además, ha recordado que «hubo un tiempo en el que en cada pueblo y en cada ciudad del archipiélago había una calle dedicada a este barco, que justificaba el relato franquista de heroicidad que ligaba las islas con el crucero». «Ha costado mucho romper este relato, pero hoy en día ya no quedan calles dedicadas al crucero. Aquí Jurado se ha equivocado dado que recientemente Madrid ha recuperado la calle en memoria del Crucero Baleares en cumplimiento de una sentencia judicial.

Por su parte, el director general de Memoria Democrática, Marc Herrera, ha recordado la labor que el Govern está realizando en materia de memoria. «Hoy en día, en Baleares el Govern abre fosas, localiza e identifica a los asesinados y los devuelve a las familias, y se está trabajando para romper definitivamente el relato franquista de mártires y cruzadas, para sustituirlo por otro que hable de legalidad democrática, de un franquismo aliado de los nazis, que hable de las víctimas ignoradas durante demasiado tiempo, de la verdad, de justicia y reparación, y de poner las herramientas pedagógicas necesarias para que nunca se olvide y nunca más se vuelva a repetir».

La historia y la sentencia

En el acto no ha habido referencias a la reciente sentencia judicial desvelada por OKBALEARES a favor de la protección del monumento al crucero Baleares.  El crucero Baleares formó parte de una flota de cañoneros, en la que también estaban los cruceros Canarias y Almirante Cervera, y que recibió el apoyo aéreo de la aviación de la Alemania de Hitler y de la Italia de Mussolini. Bombardeó la carretera entre Málaga y Almería entre el 4 y el 9 de febrero de 1937, directamente sobre la población que huía.

Jurado, en este punto, ha añadido que «la sociedad balear tiene una deuda importante con esta población y desde aquí, aunque se sabe que se llega tarde, se pide perdón».

La ruta de La Desbandá fue iniciada en 2005 para recordar y no olvidar el ataque a civiles por parte del bando de Franco, ocurrido durante la Guerra Civil española en febrero de 1937, ante la llegada de las tropas franquistas en la Málaga republicana y del que fue partícipe el crucero Baleares.

En el acto no ha habido ninguna mención a las víctimas que provocó el hundimiento del Crucero Baleares. La noche del 5 al 6 de marzo de 1938 el Baleares junto a su gemelo el Canarias y el crucero Almirante Cervera participaron en la protección de un convoy procedente de Italia. La flota franquista se encontró inesperadamente con la Armada republicana. Hacia las 02:20 del 6 marzo, varios torpedos, posiblemente procedentes del destructor Lepanto, alcanzaron la zona central y el depósito de municiones del Baleares. El buque se hundió. Se rescataron a 435 hombres; otros 786 murieron o desaparecieron.