Un marroquí condenado a 3 años de cárcel y expulsión de España por incendiar una nave en Almería

• David García de Lomana @lomanadavid
• Redactor en OKDIARIO Andalucía. Antes en COPE y MARCA Plus.
• • 27/02/2025 14:18
  • Actualizado: 27/02/2025 14:32

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la pena de dos años y 10 meses de cárcel al inmigrante ilegal marroquí que prendió fuego a una nave industrial de Almería dejando casi medio millón de euros en daños. El condenado, que también incendió un contenedor y una zona de pastos, fue descubierto por un vecino que alertó a las autoridades.

El TSJA acuerda la ejecución de dos terceras partes de la pena privativa de libertad en territorio nacional y la sustitución del resto por su expulsión del país, a lo que suma su prohibición de regreso a España por un plazo de 6 años. También le impone 473.935 euros en concepto de indemnización a las entidades perjudicadas.

La sentencia, a la que ha tenido acceso OKDIARIO Andalucía, ratifica el fallo de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial y declara como hechos probados que sobre las 6:00 horas del 20 de octubre de 2022, D. Said L. (nacido en Marruecos, en situación administrativa irregular en España y con antecedentes penales vigentes no computables a efectos de reincidencia), de 29 años entonces, se acercó a la nave industrial de la calle Escaño número 18, en el Polígono Sector 20 de Almería, y con un mechero prendió fuego al almacén. Lo hizo, recalca el fallo, movido únicamente «por un ánimo de causar la destrucción» de la nave, propiedad de Propco Epsilon S. L., una promotora inmobiliaria.

El fuego se propagó rápidamente por los materiales inflamables de origen industrial que había en la nave, que quedó inservible y tuvo que ser derrumbada casi en su totalidad. Los daños en las instalaciones fueron tasados pericialmente en algo más de 472.000 euros.

Acto seguido, el procesado fue a la calle Cordel de la Campita, en el mismo polígono, y con «idéntico ánimo» prendió fuego a un contenedor y a una zona de pastos. El contenedor tuvo que ser repuesto y los daños fueron tasados en 1.485 euros.

Posteriormente se desplazó hasta la avenida Torrecárdena, donde se aproximó a una zona de vegetación y trató igualmente de provocar un incendio, pero fue descubierto por un vecino que alertó a la Policía Local. Dos agentes se personaron en el lugar y el hombre se dio a la fuga, aunque finalmente fue detenido en un parque cercano después de mostrar una «fuerte oposición» a los policías. Fruto de este incidente fue condenado por un delito de atentado a agente de la autoridad en el curso de unas diligencias urgentes. Entre sus pertenencias llevaba un mechero de color amarillo. Al día siguiente ingresó en prisión provisional, por lo que ya habría cumplido entre rejas la parte proporcional de la pena necesaria para dictar su expulsión del país.

En el momento de la comisión de los hechos, apunta el fallo, el procesado tenía «plenamente conservadas sus capacidades intelectivas y volitivas».

El TSJA añade que la prueba indiciaria «parte de un dato que admite escasa controversia: un testigo presencial pudo ver a un individuo (…) saliendo de una zona de matorrales quemados, cercana a otra en la que minutos antes se habían producido los otros incendios». El TSJA destaca el «loable sentido de la responsabilidad» de este ciudadano, que salió a pasear a su perro y se topó con el inculpado, que le desafió diciéndole «no me mires a la cara». El testigo llamó a la Policía y ésta le indicó que se mantuviera al teléfono y siguiera al sospechoso, como así hizo.

Así las cosas, el alto tribunal andaluz desestima el recurso de apelación del acusado y confirma íntegramente la sentencia de la Audiencia de Almería que condenó a D. Said L. a dos años y 10 meses de prisión por un presunto delito continuado de daños por incendio. Contra el fallo del TSJA cabe interponer recurso de casación ante el Tribunal Supremo.