Andalucía
Torremolinos tiene una tasa de 400 contagios por 100.000 habitantes

El alcalde de Torremolinos (PSOE) permite un multitudinario festival gay: sin distancia y sin mascarillas

El alcalde socialista de Torremolinos, José Ortiz, ha permitido que se celebre en la ciudad un popular festival dirigido al público gay, el Matrix Sun Festival, en el que se han incumplido todos los protocolos para prevenir el Covid-19. Las imágenes que algunos asistentes al evento han colgado en sus redes sociales no deja ningún lugar a dudas: sin mascarillas, sin distancias y con un aforo que supera el de muchos eventos que han sido prohibidos.

Málaga, por cierto, se encuentra desde el pasado jueves en el nivel 2 de alerta, lo que supone, entre otras cosas, que el aforo de los eventos quede reducido al 75%. Además, tampoco puede haber más de seis personas en una misma mesa en el interior de los locales y el consumo en barra queda reducido a los exteriores. 

Se trata de la cuarta edición del Matrix Sun Festival, que se celebra desde el pasado jueves en la sala Palladium Club, ubicada en una ciudad, Torremolinos, cuya tasa de incidencia supera los 400 casos por cada 100.000 habitantes.

En los vídeos que acompañan a estas líneas, extraído de lo que los propios asistentes al evento han publicado en sus redes sociales, se puede apreciar cómo nadie lleva las mascarillas, ni respetan las distancias, ni se comportan como se tienen que comportar en una ciudad que, insistimos, está en nivel 2 de alerta Covid. 

José Ortiz

José Ortiz es un alcalde que en los últimos meses ha protagonizado dudosos golpes de mano en el consistorio. En diciembre de 2020, el Ayuntamiento de Torremolinos destinaba 17.000 euros a una empresa creada en 2019 y cuya administradora única es la exdiputada socialista Mari Paz Martín Lozano.

«Huele a nepotismo», lamentaba entonces la presidenta del PP de Torremolinos (Málaga) y portavoz municipal, Margarita del Cid, que advertía de que el Ayuntamiento de Málaga llevó a cabo estos mismos servicios de forma gratuita y que «resulta, como poco, sospechoso».

El decreto, que desde el PP de la ciudad consideran una «vergüenza», se asignaba mientras el Consistorio acumula impagos y propone reducciones de sueldo. Una «indecencia política» que no es «nada nuevo» y que «ha convertido a la ciudad en el ejemplo de la peor política» posible.

Apenas un mes más tarde, José Ortiz incorporaba a su plantilla a uno de los antiguos secretarios generales del PSOE de Torremolinos, Juan Ortuño Conejo, para desempeñar un cargo eventual como asesor de alcaldía por el que cobrará cerca de 50.000 euros anuales.