Los radicales impiden a Abascal salir del hotel y comparecer ante los medios en Ceuta
El presidente de Vox, Santiago Abascal, denunció haber sido víctima de una "operación planificada" por la "mafia" del PSOE para, con "la colaboración criminal y corrupta de la Delegación del Gobierno"
Varios cientos de radicales han cargado contra el líder de Vox, Santiago Abascal, al grito de «racista» o «fuera de Ceuta» evitado que pudiera dirigirse a los medios en la plaza de África, donde se tenía la intención de realizar la manifestación. Abascal que viajó a la capital ceutí cuando se produjo el asalto a la valla, se tuvo que refugiar en el Parador La Muralla donde se alojaba.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, denunció haber sido víctima de una «operación planificada» por la «mafia» del PSOE para, con «la colaboración criminal y corrupta de la Delegación del Gobierno», conseguir «acallar» a su partido, que finalmente no ha podido celebrar ni el mitin prohibido por la autoridad gubernativa con respaldo judicial ni la rueda de prensa al aire libre
«Ha utilizado a la Delegación del Gobierno que encabeza la madre de la jefa de Comunicación de Pedro Sánchez para impedir derechos fundamentales de los españoles como los de reunión y manifestación de Vox y, al mismo tiempo, ha consentido una concentración completamente ilegal que no ha sido disuelta y que nos ha impedido incluso dar una rueda de prensa», ha lamentado.
Abascal ha recriminado que los principales grupos políticos, y especialmente apuntó a Pedro Sánchez, no «pudieran tolerar la imagen de la semana pasada» cuando convocó la manifestación de Sevilla frente al Parlamento andaluz de San Telmo. Así, también ha insistido en que Sánchez «no quiere que sus propios votantes nos escuchen hablando de invasión, el secuestro de menores y su reparto por todo el territorio nacional y muchos de ellos que además están siendo buscados por sus padres en Marruecos y que defendamos -enfatizó- unas más fronteras más seguras».
«No quieren que sus votantes escuchen a los que decimos la verdad hablando de invasión, que denunciamos el secuestro y reparto por todo el territorio nacional de menores a los que buscan sus padres en Marruecos, que queremos unas fronteras seguras y militarizadas, unas fuerzas de seguridad y un Ejército con medios materiales y jurídicos. Nos quieren acallar», ha concluido, «porque hay un plan para traer a España a 250.000 inmigrantes al año hasta 2050, ocho millones de personas que acabarán recibiendo las ayudas sociales que no llegan a los españoles y condenando a los jóvenes españoles sin futuro ni empleo ni vivienda».