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Facebook: Un elefante ataca brutalmente un coche que pasaba por la carretera

En algunos países del mundo convivir con todo tipo de animales puede tener sus riesgos.

  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

En algunos países del mundo convivir con todo tipo de animales puede tener sus riesgos. Acostumbrados a toparnos en la carretera con algún que otro jabalí, pensar en que hay rincones del mundo en los que puede aparecer un elefante sorprende un poco. Si tenemos en cuenta que el choque contra un animal de estas dimensiones puede ser fatal, merece la pena ir con cuidado. Estos viajeros no pensaban encontrarse un elefante enfadado en su camino, por suerte, no chocaron, aunque, se llevaron un buen susto y un coche que necesitará pasará por el taller.

Ataca un coche que pasaba por la carretera

Este elefante apareció de la nada, se planto en medio de la carretera e hizo imposible que los coches continuarán su trayecto. Estaba tan enfadado que no dudó ni un segundo en hacer que el primer coche que llegará pagará por todos. El animal intenta atacarlo, le da golpes, incluso parece que se quiere subir encima.

El conductor del coche parecía bastante acostumbrado a toparse con elefantes. Simplemente dejó que hiciera lo que quisiese y se calmase. Cuando el elefante descargó toda su furia se fue para otro lado. Ese momento fue el que el conductor aprovechó para seguir con su trayecto. Una cámara de otro conductor grabó toda la escena y dejó constancia de uno de esos momentos que parecen sacados de una película. El coche sufrió las consecuencias de la rabia de un elefante enfadado.

Las carreteras de algunos países, en este caso Tailandia pueden esconder algunas sorpresas. El Parque Nacional Khao Yai fue el escenario de este encuentro entre humanos y animales enormes. Por suerte, el respeto entre ambos y la costumbre de tratar con elefantes evitó el desastre. Al final, todo quedó en un susto y una visita al taller. El elefante tampoco sufrió ningún daño y continuo con su trayecto.