La nueva oncología integral con el diagnóstico hipertemprano pionero en España para alcanzar la curación

OKSALUD ha convocado recientemente un panel de expertos para abordar La nueva oncología integral, un encuentro que ha contado con la participación del doctor Antonio Cubillo, director de HM CIOCC, jefe de Servicio de Oncología Médica de HM Sanchinarro y director de la Unidad Tumores Digestivos, Sarcomas y Tumores de Cabeza y Cuello; doctor Emiliano Calvo, director de la Unidad Ensayos Clínicos Fase I START-HM CIOCC; doctora Carmen Rubio, jefa de Servicio de Oncología Radioterápica HM CIOCC y presidenta de SEOR, y el doctor Rafael Álvarez, coordinador de Oncología Médica de HM CIOCC, con la directora de OKSALUD, Beatriz Muñoz como moderadora y quien ha recordado el aumento de los casos de cáncer en España, que superarán los 280.000 este año debido al envejecimiento de la población, la exposición a sustancias de riesgo como el tabaco y el alcohol, la obesidad y el sedentarismo, entre otros factores.

Para abordar esa «nueva oncología integral», los participantes han desgranado la actividad del grupo hospitalario HM, y en concreto en el Centro Integral Oncológico Clara Campal HM CIOCC, ubicado en el Hospital Universitario HM Sanchinarro de Madrid, con sedes en Barcelona y Santiago de Compostela”. Es un referente en España y en el ámbito internacional, por la integración de la labor asistencial, docente e investigadora de sus profesionales. Ofrecen una idea de su potencia cifras como 3.651 nuevos pacientes, más de 40.000 consultas, 225 ensayos clínicos que benefician a más de 400 personas y más de 18.000 tratamientos administrados, todo ello solamente en 2023.

El HM CIOCC es una red de hospitales cuya ventaja principal es que la estabilidad del equipo. «Independientemente de la puerta de entrada del paciente, en cualquiera de nuestros hospitales, la calidad de la atención es la misma, y está a cargo del mismo equipo de profesionales», ha comenzado explicando Antonio Cubillo. El cáncer se aborda «teniendo en cuenta que cada persona es irrepetible, partiendo del diagnóstico precoz y un plan de tratamiento específico, personalizado para cada paciente; no se trata sólo de la medicina personalizada basada en las características moleculares de cada tumor, sino también en las características de cada persona, con sus condiciones, circunstancias…», ha añadido.

Emiliano Calvo ha explicado a continuación que el programa de ensayos clínicos de oncología de HM CIOCC es un esquema de excelencia en el que se integran todas las disciplinas, con 70 personas dedicadas a tiempo completo y la posibilidad de acceder a fármacos que aún no se han comercializado, y muchas veces es la primera vez que se utilizan, fármacos que en varios años quizá sean empleados más ampliamente, pero a los que se accede antes a través del programa de ensayos clínicos.

Diagnóstico hipertemprano

El diagnóstico hipertemprano, un enfoque muy innovador, era el siguiente asunto abordado en este encuentro de expertos. El suyo es el primer centro de Europa en poner a disposición de personas sanas y asintomáticas una unidad de estas características. Antonio Cubillo ha declarado el entusiasmo del equipo por este tipo de estrategia, «porque el primer atajo para tratar el cáncer, además de los ensayos clínicos, es diagnosticar antes, encontrar antes el tumor». Se ha hecho una labor importante, en toda la sociedad, con la implantación de los programas de cribado cáncer de mama, citaba como ejemplo, ya que el diagnóstico en estadios muy precoces lleva a unos resultados terapéuticos excelentes.

«Hoy en día existen pruebas moleculares que pueden diagnosticar un tumor entre un año y un año y medio antes que las pruebas de radiología», ha añadido. El 70% de las muertes que se producen por cáncer se deben a tumores para los cuales no hay pruebas de detección precoz. El mayor riesgo para desarrollar un tumor es a partir de los 45 años, «si somos capaces de fomentar esta cultura, cuantas más personas puedan acudir a la unidad de diagnóstico hipertemprano, seremos capaces, en mucha mayor medida, de diagnosticar antes para tratar mejor; esto es posible a fecha de hoy», declaraba.

Carmen Rubio por su parte explicó el valor de los últimos avances en oncología radioterápica para los pacientes. La radioterapia sigue siendo uno de los pilares en el tratamiento del cáncer. En fases muy tempranas, puede ser una alternativa fundamental para la calidad de vida. Con las nuevas tecnologías y los nuevos esquemas de fraccionamiento de dosis, la radioterapia se convierte en un tratamiento con excelentes resultados y muy pocos efectos secundarios, que permite a los pacientes vivir durante mucho tiempo sin secuelas. En HM CIOCC se han ido incorporando esos avances desde sus inicios.

La radioterapia desempeña también un papel clave para mejorar los resultados en tumores avanzados, de modo que abarca todo el espectro de posibles fases de la enfermedad. Como ejemplo, valoraba que en cáncer de páncreas, un tumor en el cual los esfuerzos por mejorar los resultados de la cirugía son intensos, el fraccionamiento permite administrar dosis muy elevadas (y eficaces) con mayor seguridad, «con resultados que no tienen precedentes». Asimismo, el equipo de oncología radioterápica integrado es clave para mejorar los resultados y su interconexión con el resto de unidades redunda en el beneficio de los pacientes.

Todos a una: trabajo en red

Las últimas innovaciones en radioterapia incluyen el tratamiento de muchas lesiones en un isocentro (punto en el que convergen los haces de radiación) que requieren «precisión submilimétrica». La incorporación de sistemas que monitorizan al paciente de forma continua con interrupción automática si hay algún movimiento involuntario y equipos de imagen guiada que controlan el movimiento de los órganos, como los pulmones, administrando la terapia con mayor precisión aún. En breve añadirán equipos de radioterapia adaptativa, que permite ajustar dosis (no solo posicionamiento) en cada sesión. La personalización se basa en el factor humano en la persona, pero también es medicina de precisión «en tiempo real», ha dicho la Dra. Rubio.

La coordinación de todos los profesionales tiene mucho que ver con la consideración del paciente como un todo, y esa idea de oncología integral. La adaptación de los servicios en red, implica que expertos de campos diferentes colaboran en los mismos comités para el abordaje de cada caso individual. Se reúnen de forma presencial o telemática, pero la clave es que «todos trabajamos en común, y no solo el servicio de oncología, también los demás servicios implicados, ya sea cirugía, urología, radiología, medicina nuclear… todos están alineados con el hecho de que en el CIOCC se trabaja en red», ha apuntado Rafael Álvarez.

Investigación a un ritmo vertiginoso

Partiendo de que «sin investigación no hay cura», los oncólogos tienen como objetivo fundamental la mejoría del paciente, y ese espíritu preside la actividad de los ensayos clínicos. Son estudios en los que las compañías que desarrollan nuevas terapias buscan «por todo el mundo», centros de excelencia en los cuales se cumplan las condiciones para poder estudiar nuevos tratamientos. El hecho de trabajar de forma estrecha con otros servicios es un requisito clave, y algo que está «en el corazón de un centro que busca esa excelencia». Su programa abarca todo tipo de tumores, de los más a los menos frecuentes.

Antonio Cubillo ha celebrado los últimos avances en el campo de la oncología, que «además, se producen cada vez más rápido», matizando que nunca se avanza lo suficiente, y que su afán es llegar a todos los pacientes. Así, explicaba que en los últimos años se ha producido una «explosión» de los tratamientos basados en la inmunoterapia. En HM empezó a usarse antes, dentro del programa de ensayos clínicos. Actualmente se está estudiando la combinación de inmunoterapias (porque administradas de forma aislada no son eficaces para todos los pacientes), la terapia celular y, como línea muy importante, «vacunas» para evitar recaídas. Otras terapias “que van a convertirse en una oleada importante de innovación” son tratamientos como los llamados inhibidores de KRAS, que se están perfeccionando «y van a ayudar a muchas personas».

Carmen Rubio ha explicado que dentro de los pacientes que se consideraban más difíciles de tratar, quienes viven con tumores en fases metastásicas (extendidos a órganos diferentes de los que albergaban el cáncer en primer lugar), ya hay personas que gracias a los avances en oncología llevan libres de enfermedad diez años: «Era algo impensable años atrás».

El Dr. Calvo corroboraba este fenómeno, añadiendo que el próximo objetivo es «que todos los pacientes se beneficien», al margen del tipo de tumor con el que vivan. “El proceso de la innovación en oncología es muy acelerado”, añadía Rafael Álvarez.

Cada vez antes, cada vez mejor

Para Antonio Cubillo este fenómeno enlaza con el planteamiento de pensar en el futuro de los pacientes, «cuando recuperen su vida laboral, su actividad normal en todos los sentidos; es algo que hay que planificar y tener una estrategia para facilitar el proceso desde el comienzo, con cada persona de forma individual».

Asimismo, insistía en que de cara al futuro de la oncología, está convencido de que el diagnóstico hipertemprano será algo que calará en la población, y que el hecho de «ser protagonista de la propia salud» tomando las riendas y participando en las pruebas de cribado será una actitud cada vez más extendida.

El Dr. Calvo abundaba en esta idea combinando la noción de diagnóstico precoz con tecnologías que se van haciendo cada vez más accesibles (como la prueba de sangre para detección de ADN tumoral circulante): «Hará que los tumores avanzados desciendan de forma drástica, pero además en tumores avanzados también la especialidad tendrá cada vez más que ofrecer». El Dr. Álvarez añadía la atención a los largos supervivientes, «con menos secuelas cada vez».

Finalmente, todos los expertos han animado a la población a abrazar la cultura de la prevención (evitando los factores de riesgo) y del diagnóstico hipertemprano, que de cara al futuro será clave para alcanzar la curación, como aventuraba el Dr. Cubillo.