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Beneficios del balance energético para combatir el sobrepeso

El sobrepeso es un problema que afecta a la salud de muchas personas. Por suerte, cada vez existen más técnicas, dietas y entrenamientos para luchar contra él. Lo último para combatirlo se llama balance energético, un sistema que pretende encontrar el equilibrio entre lo que comemos y lo que gastamos.

¿En qué consiste?

Hacer ejercicio supone compensar la energía consumida para llegar al balance energético.

Básicamente su secreto está en la recomendación de equiparar las calorías que consumimos con las que gastamos (a este gasto energético se sumaría el del metabolismo en reposo).

En palabras de la Jefa del Departamento de Nutriología del Deporte de la Universidad Nacional Autónoma de México, Rebeca Camacho Trujillo: “El balance energético o equilibrio energético se refiere simplemente a que debemos comer la misma cantidad de energía que gastamos. Energía ingerida en la dieta = energía gastada en funciones vitales y en actividades”.

En este sentido, la OMS reveló en el año 2011 que “la causa fundamental del sobrepeso y la obesidad es un desequilibrio energético entre calorías consumidas y gastadas”.

¿De qué depende el consumo energético?

La energía ingerida no debería superar a la que gastamos.

El consumo de energía depende de tres factores:

  1. La metabolización de los alimentos (cómo se almacenan los nutrientes en nuestro cuerpo): Este proceso supone un 10% del consumo de energía total.
  2. El metabolismo basal: Es el gasto de energía que el cuerpo necesita para realizar las funciones vitales básicas (respirar, actividad del corazón…). En este caso, el consumo supone entre el 60-70% del total.
  3. Actividad física: Esto supondría el gasto de energía restante (entre un 10-30%).

En el término medio está la virtud

En el equilibrio está la clave para llevar una vida sana.

Hay tres formas en las que se puede presentar el balance: negativo, positivo o el equilibrio energético. Si el balance es positivo significa que se ha ingerido más energía de la que gastamos y que, por ello, se acumula en nuestro cuerpo; mientras que si es negativo, el proceso se invierte provocando problemas de salud.

El equilibrio sería la situación ideal. Por eso, conocer el concepto de balance energético es uno de los factores más importante para mantener una buena salud y mantenernos en nuestro peso.