Tabasco casero
El tabasco casero es un condimento picante, originario de México. Esta salsa se distribuyó desde el siglo XIX, cuando a un comerciante se le ocurrió la idea de enfrascarla. Suele utilizarse para darle un toque especial a cualquier plato, desde una sopa hasta una carne. Sin embargo, hacer el tabasco casero es muy sencillo y rápido, debido a que su composición se basa, principalmente, en chile machado. Para ello, es sumamente importante escoger con cuidado los chiles a utilizar; son estos ingredientes los responsables del picor, y la textura de la salsa.
La salsa de tabasco es un plato con grandes propiedades nutricionales; gracias a que su composición se basa, en gran porcentaje, en los chiles. El chile es un vegetal que aporta grandes beneficios a la salud; además, no contiene grandes porcentajes de grasa, siendo ideal para las dietas adelgazantes.
El tabasco tiene propiedades expectorantes, por lo que puede ayudar con los problemas de congestión. Además, contiene un alto índice de antioxidantes, por lo que ayuda a prevenir enfermedades crónicas como el cáncer y el lupus. Ayuda y fomenta el proceso de cicatrización de la piel. Haciendo que las quemaduras o heridas sanen más rápido. Estimula los folículos del cuero cabelludo, haciendo que este crezca más rápido y sano. También produce una sensación de saciedad, ayudando a bajar de peso ya que regula y estimula el sistema metabólico. El tabasco además hidrata y protege la piel de los rayos ultra violetas.
Ingredientes:
- 40 gr de chile fresco o guindillas
- Un diente de ajo machacado
- 40 gr de chile en polvo
- 500 ml de agua
- Cuatro cucharadas de sal
- Cinco cucharadas de harina de maíz
- 125ml de vinagre blanco o de manzana
Cómo preparar el tabasco casero:
- Es importante utilizar el chile adecuado para esta salsa. El mejor suele ser un chile alargado y redondeado en la punta, de color rojo brillante. Este le dará el sabor adecuado.
- Lavar y abrir los chiles, retirando cuidadosamente las semillas. Es importante evitar que queden semillas en la salsa, ya que estas afectan el sabor y textura de esta.
- Colocar el agua a hervir en una olla, y agregar la harina de maíz. Remover hasta obtener una espesa mezcla homogénea.
- En una batidora, o licuadora agregar los chiles, el vinagre, el chile en polvo, el ajo, la sal y el agua con la harina de maíz.
- Batir hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
- Envasar en frascos esterilizados, para que se pueda conservar durante bastante tiempo.
Temas:
- Recetas de salsas
Lo último en Recetas de cocina
-
Donas de cacao y coco al horno: postre dulce, ligero y sin freír
-
Muffins de arándanos sin azúcar: suaves, esponjosos y listos en 20 minutos
-
Leche materna para gatos casera, la receta definitiva
-
Pizza de garbanzos y espinacas: sin gluten, crujiente y deliciosa
-
Wraps de lechuga y pollo sésamo: la cena ligera que necesitas probar
Últimas noticias
-
El ranking de los países más seguros en caso de que estallara una guerra mundial
-
Ni huevo ni palillos: el sencillo truco de los asturianos para no se rompan los cachopos al freírlos
-
Test de personalidad: la forma en que sostienes tu móvil revela si tienes una inteligencia superior
-
¿Por qué los coches de Fórmula 1 son cada vez más oscuros?
-
Le pido a ChatGPT el número del Gordo de la Lotería de Navidad 2024 y esto es lo que me ha dicho