Opinión

Colleja del FMI a la política económica de Sánchez

Lo que le ha venido a decir el Fondo Monetario Internacional (FMI) a Pedro Sánchez es que se deje de cuentos y presente de una vez por todas un plan de consolidación fiscal «creíble», porque todo lo que ha hecho el Gobierno socialcomunista hasta ahora es puro humo. Y es que el FMI ya le ha cogido la matrícula al Ejecutivo, propenso a la propaganda pero incapaz de poner negro sobre blanco políticas económicas creíbles para garantizar el futuro de las pensiones y reducir la deuda pública. Se lo ha dicho así: «Una formulación temprana de un plan creíble de consolidación fiscal a mediano plazo podría ayudar a generar el consenso social necesario y respaldar la confianza de los inversores», lo que, traducido al lenguaje de la calle, significa que ya está bien de parches. Dice el FMI que, si bien la recuperación está en curso y el empleo se ha recuperado con fuerza, la actividad se mantiene por debajo de los niveles previos a la pandemia y las perspectivas se ven empañadas por una elevada incertidumbre. O sea, que hay más nubarrones que claros en el horizonte. «El panorama es altamente incierto y dependerá de la evolución de la pandemia y la persistencia de cuellos de botella en el suministro global», añade el FMI, subrayando que el ritmo de absorción y la eficacia del uso de los fondos europeos también afectarán el crecimiento de España en los próximos años.

Entre el dibujo gris del Fondo Monetario Internacional y el paisaje en colores que pinta Pedro Sánchez hay un trecho tan largo como el que media entre el realismo y ese optimismo vacuo de un Ejecutivo que todo lo fía a la propaganda y al marketing. Por eso el FMI, aunque sea con alambicadas palabras, le ha dicho al Gobierno socialcomunista que ya va siendo hora de pasar de las palabras a los hechos.