Navidad

Cómo hacer el Portal de Belén con los niños

Con la ayuda de los niños podemos elegir el rincón para nuestro Portal de Belén, hecho con musgo, corcho e incluso harina.

En estos días previos a la Navidad, seguro que son muchas las familias que ya habrán puesto y decorado su árbol de Navidad, pero no debemos olvidarnos del pesebre, que es otro de los símbolos tradicionales de la Navidad. Por ello, y para que los niños se ilusionen en una Navidad que va a ser sin duda, algo dura para todos, os explicamos cómo hacer el Portal de Belén con los niños.

Cómo hacer el Portal de Belén con los niños

El portal de Belén o pesebre es algo típico de nuestra Navidad. Representa el momento del nacimiento de Jesús, acompañado de sus padres, y además recibiendo la visita de los Reyes Magos y para ello se requieren todo tipo de elementos, que podemos hacer en casa con distintos materiales o comprarlos e irlos colocando Navidad a Navidad.

Nosotros os proponemos hacer un portal de Belén casero. Uno que podáis hacer fácilmente con los niños, a partir de los pasos que os vamos a enumerar.

El rincón de la casa adecuado

Lo primero que debes tener en cuenta a la hora de hacer o de montar el portal de Belén es que debe tener su propio espacio en la casa, de la misma forma que ocurre con el árbol de Navidad. Podemos disponer en un rincón una mesa auxiliar, o vaciar una balda o estante en el salón o comedor para montar allí nuestro pesebre. Lo importante es que sepamos el tipo de belén que queremos montar (en lo que a dimensiones respecta) y a partir de ahí colocarlo en un lugar específico, libre además del paso constante de personas o a una altura a la que por ejemplo nuestro perro, no tenga acceso, para que de este modo todos los elementos y figuras se mantenga y no se caiga nada.

Una vez elegido el lugar, será bueno colocar un cartón duro antes que el pesebre para que todo se aguante bien y que la mesa o balda pueda estar junto a una pared para de este modo decorar mucho mejor nuestro pesebre.

Monta la base

La base ideal de cualquier portal de belén es el musgo y a poder ser natural, pero si no deseas gastar dinero siempre puedes recurrir a varias soluciones. Una de ellas es usar un poco de fieltro verde que pegar al cartón antes mencionado. Otra será pintar ese cartón o colocar también encima una cartulina de color verde.

Decora el fondo

No estará de más que también decores la pared que antes hemos mencionado. Puedes hacerlo colgando una cartulina en color negro, como si fuera de noche y que los niños pinten la estrella de Navidad y otras estrellas. Además podemos dibujar o pegar también el dibujo de algunas montañas que crearán un fondo más bonito a nuestro pesebre casero.

El río del portal de Belén

Los pesebres más elaborados o en los que se gasta más presupuesto pueden optar algún sistema  que permita tener un río con agua de verdad, pero si no deseas gastar mucho y además quieres que los niños participen de forma activa al montar el belén, nada como optar por la tradición: hacer el río con un trozo de papel de aluminio. De este modo, tan solo hay que coger  un trozo de papel de plata que sea un poco largo, doblamos por la mitad, y lo colocamos desde las montañas hasta la mitad de nuestro pesebre.

Para que quede más realista, coloca alguna que otra piedra pequeña, cubre los bordes con musgo o un poco de restos de pino del árbol y además no pueden faltar figuritas como algún que otro pez o unos patos. Si no los tenemos, podemos pedirle a los niños que las hagan con plastilina por ejemplo.

No olvides los caminos

En los portales de Belén más tradicionales siempre vemos además algún que otro camino para colocar encima a los pastores y a los Reyes Magos que se dirigen al pesebre donde está el Niño Jesús. Para ello tan solo debes colocar un poco de arena, de tierra de una maceta o también, un poco de serrín.

Coloca las casas y el resto de infraestructuras

En el caso de que tengas casas en tu portal de Belén o quieras usar pequeñas casitas de alguno de los juguetes de los niños, colócalos en la parte trasera del belén (para que no ocupen mucho espacio) y sobre todo que estén conectadas al camino que hemos hecho, aunque no hace falta que llenemos el belén de casas, piensa que la única construcción importante que debe haber es el establo con el Niño Jesús.

No te olvides además de colocar el resto de infraestructuras, como el puente encima del río, así como el corral junto al pesebre o si tienes uno, puedes colocar un granero.

Coloca el pesebre o establo

El establo en el que va a estar el Niño Jesús es como decimos un elemento principal, por lo que debería estar un poco más avanzado que el resto de elementos de nuestro portal de Belén y o bien lo colocas en el centro o lo pones en una esquina y que todos los elementos y figuras se orienten hacia este. En el caso de no tener un establo puedes hacerlo con un poco de corcho o con una caja, sin olvidar además que su base tendrá que estar llena de paja.

Coloca las figuras

Pasamos a algo que encanta a los niños, especialmente a los más pequeños. Llega el momento de colocar las figuras de nuestro belén casero. Lo primero será poner al Niño Jesús con su cuna, la Virgen María (izquierda), San José (derecha) y detrás de estos tres (y si queremos, al fondo del establo) al buey y a la mula.

Luego vendrán los pastores, las lavanderas del río, otras figuras o personajes como el «cagané» que es tradicional en Cataluña y como no, los tres Reyes Magos montados en sus camellos.

No te olvides de la nieve y de las luces

Para acabar, no puede faltar un poco de nieve que podemos comprar o hacer con un poco de porexpan rallado, o de harina, pero eso sí, no será bueno abusar de ello ya que solo debes colocarla encima del pesebre y el resto de casas o estructuras.

En cuanto a las luces, las puedes colocar alrededor de todo el portal de Belén pero sobre todo, una luz roja debe estar dentro del pesebre para que simule el fuego que caliente al Niño Jesús.