La razón por la que la Lotería de Navidad jamás sube de precio

La Lotería de Navidad, un evento profundamente arraigado en la tradición española, reúne cada 22 de diciembre a millones de personas ilusionadas por la posibilidad de ganar alguno de sus emblemáticos premios. Este sorteo se organiza con dos bombos: uno grande, que contiene los 100.000 números participantes, y otro más pequeño, que guarda las bolas con los diferentes premios. Las bolas del bombo principal, fabricadas en madera de boj, son idénticas en tamaño y peso, mientras que el bombo menor incluye un total de 1.807 bolas con premios, desde el famoso Gordo hasta la pedrea.

En el sorteo de 2024, se repartirán 2.408 millones de euros en premios, siendo el Gordo el más codiciado. La Inteligencia Artificial ha anticipado que el número 90515 podría ser el ganador del Gordo de Navidad, basándose en tendencias históricas y características afortunadas. Este número termina en 5, la cifra más premiada en la historia del sorteo, ganadora en 32 ocasiones. Además, pertenece a la franja de los 90.000, considerada «afortunada» por haber generado ganadores previos. Aunque no es capicúa, su selección está influida por la tendencia de cifras repetidas, como ocurrió en 2023 con el 88008. Sin embargo, el sorteo sigue siendo impredecible, y la verdadera magia radica en la ilusión que cada jugador deposita en sus números favoritos.

Precio del décimo de la Lotería de Navidad

Este 2024 no habrá cambios respecto al precio del décimo de la Lotería de Navidad. A pesar de que se había especulado en ocasiones con un posible aumento, el precio del décimo de la Lotería de Navidad seguirá siendo el mismo que en los últimos años: 20 euros. Esta cantidad se mantiene desde el año 2002, cuando se adoptó el euro como moneda oficial en España.

A lo largo de la historia, el precio del décimo de la Lotería de Navidad ha experimentado una serie de cambios, reflejando tanto la evolución económica del país como la adaptación a los tiempos. En 1812, por ejemplo, el precio de un décimo era de 40 reales, lo que equivaldría a unos 0,06 euros en la actualidad. A lo largo del siglo XIX, el precio fue incrementándose progresivamente; en 1891, pasó a ser de 50 pesetas (aproximadamente 0,30 euros).

Con el avance del siglo XX, el precio continuó aumentando. Entre 1900 y 1946, el precio del décimo llegó a ser de 100 pesetas (aproximadamente 0,60 euros). A partir de 1947 y hasta 1956, el precio se duplicó hasta alcanzar las 200 pesetas, equivalentes a 1,20 euros. En la siguiente década, de 1957 a 1962, el precio siguió subiendo hasta las 400 pesetas (2,40 euros), reflejando un contexto económico diferente.

En los años 60, el precio alcanzó las 500 pesetas (3 euros) entre 1963 y 1966. Luego, entre 1967 y 1976, el precio del décimo llegó a las 1.000 pesetas (6 euros). En las décadas siguientes, el precio siguió incrementándose de forma paulatina. De 1977 a 1988, pasó a las 2.000 pesetas (9 euros), y entre 1989 y 1990, alcanzó las 2.500 pesetas (12 euros).

Finalmente, en 1991, el precio del décimo de la Lotería de Navidad subió a las 3.000 pesetas, que equivalían a 18 euros. Este aumento fue significativo, ya que marcó el paso hacia la introducción del euro como moneda oficial en el país. De hecho, desde 2002, el precio se estableció en 20 euros, una cantidad que se ha mantenido estable hasta la fecha.

Premios del sorteo

En cuanto a los premios, no se han producido cambios importantes en los últimos años. El primer premio, el Gordo de Navidad, reparte 400.000 euros al décimo (es decir, 4 millones de euros por serie). Además, existen otros grandes premios, como el segundo premio, que reparte 125.000 euros al décimo (1,25 millones de euros por serie), y el tercer premio, con 50.000 euros al décimo (500.000 euros por serie).

También se reparten dos cuartos premios de 20.000 euros al décimo y ocho quintos premios de 6.000 euros al décimo, sumando una gran cantidad de premios menores que ayudan a hacer de este sorteo una verdadera fiesta nacional, con millones de euros repartidos entre miles de afortunados.

Cobro

Los premios de la Lotería de Navidad se pueden cobrar a partir de la tarde del 22 de diciembre, una vez finalizadas las verificaciones y procesos informáticos del sorteo. Para importes menores a 2.000 euros, el cobro se puede realizar en cualquiera de los 10.884 puntos de venta oficiales de Loterías, en efectivo o incluso a través de Bizum.

Por su parte, los premios iguales o superiores a 2.000 euros se deben cobrar en entidades financieras autorizadas, como BBVA y CaixaBank. Este año, al caer el sorteo en domingo, es probable que el pago de estos premios mayores comience el lunes 23 de diciembre, salvo excepciones. Si los décimos se compraron online, los premios serán transferidos a la cuenta asociada a la cuenta de juego tras verificar los datos.

Es importante tener en cuenta que los premios se pueden cobrar hasta el 24 de marzo de 2025, ya que caducan tres meses después del sorteo. En caso de un décimo deteriorado, el portador debe acudir a un punto de venta para solicitar su autenticación. Si el décimo es compartido, todos los participantes deben identificarse al cobrar premios superiores a 2.000 euros. En caso de robo, es fundamental interponer una denuncia y, si el décimo resulta premiado, presentarla en un juzgado para iniciar los trámites pertinentes.