Internacional

En libertad tras 43 años en la cárcel por un asesinato que no cometió

Sandra Hemme pasó 43 años en la cárcel tras ser acusada injustamente por un asesinato hasta que se demostró su inocencia. Ha salido de prisión este viernes. Después de pasar más de dos tercios de su vida encerrada, Hemme ha visto como su condena ha sido anulada por un tribunal de Misuri. La mujer, de 64 años, es la persona de la que hay constancia que más tiempo ha pasado encarcelada injustamente en Estados Unidos. 

Hemme fue condenada a cadena perpetua cuando tenía 21 años. La consideraron culpable del asesinato de Patricia Jeschke, una bibliotecaria de 31 años, en noviembre de 1980. La víctima, brutalmente asesinada, también sufrió una agresión sexual. Hemme fue una de las principales sospechosas desde el inicio de la investigación. La mujer, paciente psiquiátrica, salió un día antes del asesinato del centro en el que estaba internada y durante el interrogatorio estaba bajo los efectos de una fuerte medicación que no le permitía mantenerse erguida. La sospechosa terminó por confesar el crimen, y aunque las declaraciones de la mujer no coincidían con las pruebas encontradas, fue condenada a cadena perpetua.

No había ninguna prueba física que vinculara a Hemme con el asesinato, ni existían evidencias de que se conocieran, ni testigos. Tampoco había móvil para el crimen. La única prueba era una confesión de una paciente psiquiátrica bajo los efectos de la medicación.

Además, existían pruebas que vinculaban a un policía, fallecido en 2015, con el asesinato. El agente Michael Holman, del Departamento de Policía de St. Joseph, donde se produjo el asesinato, usó la tarjeta de crédito de la víctima  el día siguiente del crimen. El vehículo del policía fue visto aparcado cerca de la casa de la bibliotecaria a la hora de los hechos y fue descubierto cuando trataba de esconder unos pendientes de la víctima en su vivienda.

El Tribunal ha tenido en cuenta toda la información detallada para anular la condena de Hemme. «La única prueba que la vinculaba con el crimen era la de sus propias declaraciones inconsistentes y refutadas, declaraciones que fueron tomadas mientras estaba en crisis y con dolor físico», dijo el juez Ryan Horsman, en julio, cuando revocó la condena de cárcel al considerar que su inocencia estaba demostrada.

La organización Milagro de la Inocencia, que trabaja con personas condenadas injustamente, ha apoyado a Hemme en su camino para demostrar su inocencia y salir de la cárcel. «Damos gracias de que la señora Hemme finalmente se haya podido reunir con su familia después de 43 años. Ha pasado más de cuatro décadas encerrada erróneamente por un crimen con el que no tiene nada que ver», han publicado los abogados de la mujer, que trabajan con la organización. «Esta noche está rodeado de sus seres queridos, donde debería de haber estado todo el tiempo».

La orden de puesta en libertad para Hemme se ha visto retrasada por la intervención del fiscal general de Misuri, Andrew Bailey, quien se opuso a la anulación de la condena. El fiscal argumento que la mujer tenía dos condenas por delitos que cometió estando en la cárcel y que sumaban una pena de 12 años. La intervención de Bailey retrasó la liberación de Hemme, a pesar de que el juez le acusó de desacato. Finalmente, fue el Tribunal Supremo del estado quien decreto la puesta en libertad de Hemme.