España
Escándalo en Sumar

Los WhatsApp que Elisa Mouliaá presenta como prueba del delito sexual de Errejón: «Me estaba invadiendo»

«Pues tía, decepcionadísima con Errejón», asegura Elisa Mouliaá a una amiga

La actriz y presentadora Elisa Mouliaá ha presentado este viernes ante la Policía Nacional unas capturas de pantalla de una conversación de WhatsApp para probar el delito sexual por el que ha denunciado a Íñigo Errejón, ex portavoz de Sumar y antiguo líder de Más País. Se trata de un intercambio de mensajes con una amiga suya. En ellos, critica la actitud del que fuera fundador de Podemos: «Me estaba invadiendo».

«Pues tía, decepcionadísima con Errejón», puede leerse en la imagen en la que responde a su amiga, que se interesa por cómo fue la noche con Errejón. «Fui a su firma de libro, luego cenamos y fuimos a casa de Borja y Soraya y me llevó a una habitación y me entró a saco», informaba a su amiga. Y añade: «Luego le dije que Sienna [su hija] estaba malita con fiebre, que me llamó mi padre a las 6 y, como ya íbamos en el coche, no te creas tú que me dijo que volverme (sic) o cogerme otro». «Llegamos a su casa y siguió intentándolo y le paré otra vez los pies y le dije que me estaba invadiendo», apostillaba en sus mensajes de texto.

Los hechos que relata la artista ante Policía Nacional tuvieron lugar a finales del mes de septiembre del año 2021, según indica el escrito. Llevaban un año hablando por redes sociales y, en el día de los hechos, Errejón la invitó a la presentación de su libro. Posteriormente, tomaron unas cervezas y Mouliaá le invitó a una fiesta con amigos de ella. Ambos cogieron un taxi para ir a ese evento.

«Una vez en el interior del coche, Íñigo cambia de actitud y torna en una actitud dominante» diciéndole a la actriz «que le iba a imponer tres reglas». «La primera que no se alejase mucho de él esa noche, la segunda que si lo hacía no se fuese a más de veinte metros de él y regresase en un minuto y la tercera que esa noche le diese un beso», puntualiza. «La declarante se sintió violentada y cortada, si bien decidió guardar silencio por ser quien era», confiesa la artista en el escrito policial.

«Muy intimidada»

En cuanto bajaron del coche y entraron en el edificio, Errejón le dijo a Mouliaá: «La tercera regla la voy a romper ahora mismo». «Acto seguido agarró a la denunciante fuertemente de la cintura y la comenzó a besar, introduciéndole su lengua en el interior de su boca, dejándola sin respiración y de una forma violenta», describe la actriz. Y añade que esto lo hizo «invadiendo el espacio de la declarante y haciendo que la misma se sintiese muy intimidada».

Acto seguido, entraron a la fiesta de los amigos de ella y estuvieron hablando y bailando con el resto de asistentes. En un momento de la noche, Mouliaá «comenzó a bailar con un amigo suyo una canción de Los Secretos, hecho que la denunciante opina que debió producir un ataque de celos» a Errejón. «Éste la agarró fuertemente del brazo y la llevó por la fuerza durante unos seis metros, por un pasillo, hasta introducirla en el interior de una habitación de la casa», narra la actriz en la denuncia.

«El denunciado cerró con pestillo la puerta, para impedir que la dicente pudiese escapar, comenzando a besar y a tocar a la dicente por distintas partes de su cuerpo, sobre todo la zona de los pechos y de los glúteos», abunda el escrito policial.

La actriz cuenta a los agentes que Errejón «le llegó a quitar el sujetador al tiempo que le decía frases lascivas del tipo cómo me pones, todos estos hechos ocurrieron sin el consentimiento de la declarante». «Acto seguido empujó a la dicente sobre la cama y el denunciado se sacó su miembro viril, comenzando a lamer la zona de los pechos de la declarante», continúa relatando.

«Paralizada, no consintió nada»

En ese momento, ella se sintió «paralizada» y asegura «que no consintió nada de lo que sucedió». A continuación, volvieron donde estaban todos, pero Errejón le impuso la condición de que «en veinte minutos ambos se tenían que ir de la fiesta a la casa de Íñigo». Apenas unos minutos después de estar en la fiesta, el que fuera portavoz de Sumar, según declara Mouliaá, «agarró la chaqueta de la denunciante y se la puso con mucha celeridad».

En el trayecto de camino a casa de Errejón, la actriz recibió una llamada de su padre: «Decía que su hija, de un año de edad en ese momento, tenía cuarenta de fiebre». Esa llamada «preocupó mucho» a Mouliaá, pero Errejón «no reaccionó en absoluto».

«Íñigo mantenía una actitud fría e impasible a lo que estaba sucediendo, no interesándose de ningún modo en el estado en el que se encontraba su hija pequeña, no llegando ni a ofrecerle la posibilidad de trasladarla hasta el domicilio de sus padres», explica la actriz. Ella «se sintió muy mal, ya que estaba preocupada por su hija» y «no comprendía muy bien la actitud que mostraba» Errejón.

Al entrar en la casa del ex portavoz de Sumar, «sin mediar palabra comienza nuevamente a besar a la denunciante en los labios, mientras la realizaba tocamientos por la zona de los pechos y de los glúteos». Todo ello, «mientras trataba de trasladarla hasta su habitación».

Mouliaá se sentía «muy incómoda» y todo le estaba «pareciendo muy violento». Por eso, le espetó a Errejón: «Sólo sí es sí, parece mentira que me esté pasando esto contigo». Le preguntó «si no sabía lo que era la seducción, los tiempos y la escucha». A esto, el que fuera fundador de Podemos le respondió «dándole las gracias» y diciéndole «que eso le iba a servir para futuros encuentros». Este intercambio de palabras provocó a la actriz «sorpresa, repulsión y decepción». «Preguntada a la declarante si se siente víctima de un delito sexual responde que sí», subraya el escrito policial.