España

Sánchez admite que la reforma de la Constitución no se abordará hasta dentro de seis meses

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha confirmado este viernes que mantiene su confianza en el compromiso del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para abordar una reforma de la Constitución, dentro de seis meses.

«Lo que ha mí me ha dicho el señor Rajoy es un compromiso de que vamos a poner en marcha la comisión modelo territorial y, dentro de seis meses, vamos a empezar a abordar la reforma constitucional», aseguró el dirigente socialista, en rueda de prensa en Valladolid.

«Somos un partido que cumple con su palabra. Yo tomo la palabra de Rajoy de manera seria», añadió.

El secretario general ha zanjado la polémica surgida en los últimos días, después de que los socialistas acusasen al PP de romper con la promesa que, el pasado septiembre, Rajoy hizo a Sánchez a cambio de su apoyo al artículo 155.

El origen de la controversia fueron unas declaraciones del secretario general del grupo parlamentario del PP, José Antonio Bermúdez de Castro, en las que aclaraba que su partido no acudía»con la idea preconcebida de reformar la Constitución, sino de modernizar el Estado Autonómico». En resumen, la finalidad para la que se ha constituido la comisión.

Las palabras de Bermúdez de Castro-que ejercerá como portavoz del PP- provocaron sorpresa en los socialistas, que, en público y en privado, hicieron circular su malestar contra los ‘populares’. Adriana Lastra, vicesecretaria general del PSOE, incluso vinculó la  polémica surgida al respecto con la «guerrilla de campaña» y las «turbulencias» ante la proximidad de las elecciones en Cataluña.

La polémica obedece, en cambio, a una mala interpretación de los tiempos por parte de los socialistas, al considerar que la comisión actual debe abordar ya una reforma de la Carta Magna, cuando el compromiso exacto entre Rajoy y Sánchez fue que ésta se empezaría a debatir una vez finalizasen sus trabajos, en un plazo previsto de seis meses.

Los ‘populares’ no tienen prisa en abrir el melón constitucional porque, advierten, el debate para una nueva Carta Magna debe ser pausado y reunir el máximo acuerdo entre las formaciones políticas. El coordinador general, Fernando Martínez-Maíllo ya avisó esta semana de la prioridad de «mantener los consensos de 1978».

El PP considera además que los socialistas no han dejado aún clara su propuesta, más allá de la idea de ‘plurinacionalidad’, defendida por Sánchez, y que genera amplios recelos en el partido y el Gobierno.

«De la mano» con el PSC

Por otro lado, Sánchez ha avanzado también que su partido irá «de la mano» con el PSC a la hora de tejer pactos de Gobierno tras las elecciones catalanas del 21 de diciembre, de las que prevé que salga un escenario político muy fragmentado.

Sánchez interpreta como una estrategia de «puro electoralismo» las dudas que tienen PP y Ciudadanos ante un posible pacto del PSC con los independentistas de ERC y el PDeCat.

«Si hay un líder confiable en esta crisis ése es Miquel Iceta», ha asegurado Sánchez, que ha retado a los dirigentes del PP que siembran estas dudas a que pregunten al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, o a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, si Iceta es de fiar o no.

Aunque se le ha preguntado expresamente por ello, Sánchez no ha querido aclarar si los eventuales pactos de gobierno que selle el PSC tras el 21-D deberán ser avalados por el Comité Federal del PSOE. Sánchez se ha limitado a dar por hecho que PSOE y PSC irán «de la mano». «Faltaría más», ha respondido, antes de garantizar que la unidad de acción demostrada por los dos partidos hermanos en los últimos días va a continuar tras las elecciones catalanas.